La licenciada Gladys Moreira señala que la respuesta en el primer mes del servicio ha sido buena. Asimismo, que las mujeres que llegaron a las consultas expresaron su satisfacción y destacaron además que les hacía falta un servicio como ese.
“Les invitamos a todas las mujeres que vengan. Estamos los lunes y miércoles. No tienen que pagar nada. En este primer mes que hemos puesto en marcha este servicio, no hemos tenido aún muchas pacientes. Pero las que vinieron la primera vez, repitieron el encuentro”, indica la licenciada, quien también presta servicios en el Incan.
Ansiedad. Benítez cuenta que la sensación que más se manifiesta en las mujeres que acuden a las consultas es la ansiedad. Muchas también manifiestan su temor a que la caída del cabello, la masectomía y otros procedimientos derivados del tratamiento afecten su yo como mujer. Menciona que desde la sicología se trabajan esos temores y se apuntan a potenciar los recursos a fin de afrontar la situación.
“Se trabaja la visión que tiene una sobre su imagen corporal. Eso es lo que hacemos desde la sicooncología realizando esas intervenciones tempranas. Es muy importante porque hay muchas dudas. De repente las personas afectadas tienen miedo de preguntarle a su médico. Trabajamos desde sus dudas”, sostuvo.