Se trata de don Francisco Vargas, de 72 años, quien desde hace seis meses residía en una precaria vivienda en el barrio Mburica del distrito de Cambyretá.
El hombre había abandonado su anterior pueblo, Jesús de Tavarangue, para ir a vivir con su nieto.
Sin embargo, su estadía se vio rodeada de malos tratos y falta de atenciones por parte de sus mismos familiares, según denunció a NPY.
En medio de un llanto desconsolado, relató que lo echaron y abandonaron a su suerte en plena vía pública.
Con mucha angustia contó que era víctima de agresión verbal y era amenazado constantemente con ser golpeado.
Don Francisco señaló que es beneficiario de la pensión de adultos mayores, pero el dinero prácticamente no pasa por sus manos porque es retirado por su familia.
El abuelo fue acogido por una vecina de la zona, identificada como María González, quien le brindó ropa, alimento y un techo. El caso fue puesto a conocimiento del Juzgado de Paz.
El septuagenario apela a la ayuda ciudadana para hacer frente a los gastos que requiere su atención. Los interesados pueden comunicarse al (0992) 450-590.