El periodista Oscar Pardo relató que el terremoto duró unos cinco minutos, pero le siguieron réplicas considerables de 7,5 y 6,5 grados en la escala de Richter. Explicó que la infraestructura de las ciudades está construida para enfrentar este tipo de catástrofes, por lo que no se tuvieron muchos daños en los edificios.
Las zonas costeras fueron las más afectadas. Las olas de 8 a 10 metros destruyeron las casas hechas de barro y paja. La mayor preocupación se concentró en los bordes costeros que, afortunadamente, no sufrieron daños.
Igualmente, las evacuaciones se realizaron desde la primera hasta la 15º región del país. Las familias comenzaron a ingresar nuevamente a sus viviendas en la madrugada, en medio de un frío que sacudió al país luego de tener días cálidos.
El terremoto tuvo unas 71 réplicas, algunos temblores incluso se sintieron en Argentina, Bolivia, Brasil y Paraguay.
A pesar de las 8 pérdidas humanas, Pardo llama a la tranquilidad de los chilenos residentes en países vecinos y a los que tengan familiares en el país trasandino. En el caso de los paraguayos, dijo que generalmente se instalan en la altura por miedo al mar. En ese sentido, cree que estarían todos a salvo.
Esta nueva catástrofe que azota a Chile coincide con los preparativos de las fiestas patrias del 18 y 19 de setiembre.