El anteproyecto está desde la semana pasada en el Senado. El plan promueve beneficios e incentivos fiscales a las empresas y profesionales que produzcan, distribuyan o exhiban audiovisual nacional.
Para directoras como Paz Encina, autora del galardonado filme Hamaca paraguaya (2006), la ley reduciría las peregrinaciones de los autores al extranjero para solicitar fondos a los entes culturales foráneos. “Dependemos mucho de los fondos de afuera, tenemos que acudir a la financiación extranjera, a Argentina o Europa”, dijo.
Por ello, Encina tardó en realizar un nuevo proyecto, un documental sobre la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989) titulado Ejercicio de la memoria, que la obligó a recurrir al argentino Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), al programa Ibermedia, a fondos europeos y, además, al Fondo Nacional de la Cultura y las Artes (Fondec).
INSTITUCIONES. En ese sentido, el anteproyecto establece la fundación del Fondo Nacional del Audiovisual Paraguayo (Fonap), con asignaciones del presupuesto general de la nación y un impuesto a la importación de filmes.
A la cabeza de la ley estaría el Instituto Nacional del Audiovisual Paraguayo (INAP), una entidad con presupuesto propio, para ofrecer fondos por concurso a los proyectos presentados. EFE