El Hospital de Luque del Instituto de Previsión Social (IPS) tiene obras paradas desde el 2012 por problemas contractuales con la empresa, según mencionó el director Néstor Ramón Medina. El centro médico funciona desde el 2008 y absorbe a los asegurados del Departamento Central.
El Banco de Sangre se cerró hace dos años. Los quirófanos fueron clausurados hace dos años y medio por problemas de infraestructura, como humedad. “Fue en forma provisoria y por motivos de seguridad”, indicó el director al tiempo de mencionar que ya suman varios años de la clausura. Cirugía de apéndice, hernia, vesícula y otros ya se llegaron a concretar antes del cierre.
Los médicos cirujanos fueron comisionados al Hospital Central de la previsional. “La reapertura es el clamor de todos los asegurados”, indicó el médico al tiempo de indicar que la decisión está a cargo del Consejo de Administración del IPS.
El arquitecto Gustavo Masi, director de Infraestructura de la previsional, señaló que existe un problema con la empresa a la que no se da salida para retomar la obra. “Lo más probable es que vayamos a una rescisión de contrato y volvamos a llamar a una licitación para reencauzar esa obra. No tenemos respuestas por parte de ellos”, indicó.
El edificio se adquirió con una infraestructura sin culminar, en la misma funcionaba anteriormente una cooperativa. La estructura requiere de un refuerzo y la empresa no remite un presupuesto de lo que implicará. El arquitecto no supo precisar el tiempo que le llevará a la previsional para reencauzar la obra. Masi dijo que asumió hace siete meses en el cargo, por lo que aún no da una salida al problema.
“Hace falta apuntalar nomás porque la estructura ya está", indicó Medina al tiempo de mostrarse esperanzado en que se reinicien los trabajos.
REFACCIÓN. La remodelación y adecuación del edificio permitirá contar con dos salas de cirugías y espacios para más de 62 camas, destinados para maternidad y camas de terapia intermedia.
El hospital da una atención mediana y de baja complejidad. Actualmente, cuenta con 22 camas para pacientes adultos y pediátricos. Mientras, la dependencia médica solo alberga a consultorios e interna a pacientes no graves.
Teniendo en cuenta las obras paradas, la suspensión de cirugías, el cierre del Banco de Sangre, el Consejo de Administración previó bajar a Clínica Periférica la categoría del hospital de Luque.
Una situación que se encuentra parada tras la reunión de las autoridades de Luque con los consejeros.
El Hospital de Luque absorbe por día en urgencias a 150 pacientes y semanalmente en los consultorios asciende a 250. “Tenemos déficit de médicos en urgencias”, indicó el director del Hospital.
El Consejo de Administración pidió un parecer para clasificar qué tipo de complejidad tiene el Hospital de Luque teniendo en cuenta las obras paradas y los quirófanos clausurados.
Ante el pedido, la Gerencia de Salud remitió una solicitud para que se baje la categoría de hospital a clínica periférica. Esta noticia cayó como un balde de agua fría para los funcionarios que pidieron que se revoque la medida. Las autoridades prometieron parar la propuesta.