Según la denuncia, radicada en la Comisaría de Santa Isabel, el joven se dirigía a su lugar de trabajo y luego de que se produjera su desaparición, los padres recibieron una llamada extorsiva de una persona que dijo tener en su poder al menor de edad. Acto seguido, pidió que se le gire a su número de celular un monto de dinero en concepto de rescate.
Versiones extraoficiales señalan que el padre del joven habría pagado alrededor de G. 800.000 para liberar a su hijo. Los captores, sin embargo, pidieron otros G. 800.000 más. La Policía no descarta que se trate de un autosecuestro, por las circunstancias del hecho. (R.F)