Se hizo un trabajo incluso sicológico para que la mujer pudiera superar la crisis de rechazo, sin resultado positivo, manifestó el director del centro asistencial, René Gallagher.
El personal del hospital durante una cobertura por la ciudad y haciendo el seguimiento del caso se percató de la situación de abandono de parte de la madre indígena y encontraron a la criatura en un estado de aparente maltrato e indiferencia en el tinglado municipal de Olimpo, donde suelen llegar varios nativos en busca de trabajo, señaló el galeno.
Posteriormente, la bebé fue llevada de nuevo al hospital, donde se le practicó la asistencia necesaria, ya que estaba desnutrida, muy descuidada, por la forma en que se le encontró. La evaluación médica sigue de forma constante.
El cuerpo médico y enfermero que le asistió le tomó mucho cariño a la recién nacida, con la que no dudaron en solidarizarse, dándole vestimenta. Incluso la enfermera Fabiola Samaniego le dio de amamantar, alimentándole de esta manera.
La pequeña paciente ingresó el sábado en horas de la noche al nosocomio con un aspecto inhumano y carente de atención.
La denuncia fue puesta por la enfermera Samaniego con el respaldo de sus colegas y médicos del hospital ante las autoridades policiales y, por ende, la Fiscalía, que tomaron nota del caso.
El Juzgado de la Niñez se encargará de determinar la culpabilidad de la madre por el estado de dejadez en que tuvo a la bebé y se expone a una imputación. La investigación está a cargo de la fiscala de turno Teresilde Fernández.
La madre es de la comunidad indígena Puerto María Elena, de la parcialidad Tomaraho. (Informó Alcides Manena).
