“Los bancos europeos deben ser más eficientes. Hay simplemente demasiadas sucursales con muy pocos depósitos y demasiados bancos con costes de financiación por encima de sus competidores”, señaló Peter Dattels, director adjunto del Departamento de Asuntos Monetarios al presentar el informe de Estabilidad Financiera del FMI, en el que los compara con entidades estadounidenses y japonesas.