El Tesoro informó hoy de que de esa cantidad total el grueso se emitirá en deuda a medio y largo plazo (122.904 millones de euros), mientras que otros 97.113 millones serán Letras del Tesoro.
Igual que ocurrió en 2016, aunque la mayor parte de la financiación se obtendrá mediante subastas, el Tesoro también podrá recurrir a referencias indexadas a la inflación europea en la primera puja de cada mes.
Preguntada por el ahorro de costes que ha supuesto para el Estado la reducción de la carga de intereses de la deuda en 2016, la secretaria general del Tesoro, Emma Navarro, lo cifró en unos 2.000 millones de euros, pero no hizo predicciones de cuál podría ser la cifra este año.