EFE
La competición consta de tres “ruedas” que a su vez están compuestas por once etapas, que se alargarán hasta el mes de marzo, cuando se elegirá un ganador por cada una de las cinco categorías.
Un jurado compuesto por 12 personas evaluará a lo largo del certamen aspectos como las voces, arreglos y musicalidad; textos e interpretación; puesta en escena y movimiento escénico; coreografía y bailes; y vestuario, maquillaje y escenografía.
En este sentido, el presidente del jurado, José Cozzo, aseguró hoy a Efe que durante las pruebas de admisión, que se realizaron en noviembre, “se vieron espectáculos de buen nivel”, por lo que espera que “los conjuntos que pasaron la prueba cumplan con lo que se vio”.
Por otra parte, Cozzo se refirió a aquellos conjuntos que acceden a la competencia a través de la “liguillla”, es decir aquellos que clasificaron de forma previa durante 2016 y no necesitan pasar por una prueba de admisión.
En ese caso, el presidente del jurado reconoció que tanto los jueces como el público están “a ciegas” y que las propuestas que presenten serán toda una sorpresa.
Consultado sobre la existencia de favoritos a erigirse como campeones, Cozzo aseguró que “no hay favoritos” y que cada una de las cinco categorías son “muy competitivas”.
“Cualquiera de los conjuntos que se preparan para tener una presencia en el concurso están en condiciones de obtener el primer premio”, señaló en ese sentido.
En total, 41 agrupaciones lucharán, con la creatividad y la originalidad como armas, para erigirse como campeones el próximo marzo.
La edición 2017 de la competencia fue inaugurada por la comparsa de lubolos “Nigeria”, a la que le siguieron las actuaciones de las murgas “La Venganza de los Utileros” y “La Mojigata”.
El carnaval uruguayo es la principal fiesta popular del país y es considerado, con sus más de 40 días de duración, el más largo del mundo.
“En lo que tiene que ver con los números, es indudable que es una fiesta popular”, subrayó el presidente del jurado, quien aseguró que “mueve más gente que el fútbol en todo el año”.
Concretamente, Cozzo afirmó que ve al carnaval uruguayo “en plenitud y en una evolución permanente, desde que comenzó”, algo que incluye una mayor profesionalismo en los espectáculos.
Pese a que críticas que afirman que el carnaval dejó de ser popular por sus contenidos, el presidente del jurado aseguró que “cada vez se ha hecho más popular”, algo que, según consideró, “no tiene nada que ver con la cantidad de gente ni el tipo de público que llega”.
“Mucha gente puede opinar con respecto a lo que es en particular la categoría de murgas y lo que pueden ser críticas o no críticas al Gobierno, eso es lo que está y lo que ha sido un tema a lo largo de estos años, lo que puede generar algo de polémica. Pero es una de cinco categorías”, sentenció.
“Creo que mucha gente de la que cuestiona esto... no sé si concurre a ver carnaval. O si es que le cuentan, que dice o que tiene un prejuicio determinado, porque uno ve mucha crítica acá en el Teatro de Verano y en los tablados”, subrayó Cozzo.
Además de los espectáculos en el Teatro de Verano, docenas de “tablados” se dispusieron a lo largo y ancho de Montevideo para asegurar que todos puedan disfrutar de la principal fiesta del país.
Así, las murgas (conjuntos corales y musicales que interpretan letras satíricas), los parodistas (grupos teatrales que parodian algún episodio histórico o personaje popular en clave de humor), los humoristas (pequeños grupos de comediantes) y “los negros y lubolos” (intérpretes y bailarines de candombe), exhiben sus espectáculos y compiten para ser elegidos como los mejores del año.