De hecho, recientemente el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) emitió una resolución por la que suspende la mezcla obligatoria del 1% del biodiésel por cada litro de gasoil (los emblemas ya no están obligados a comprar), alegando que no existe la cantidad suficiente de proveedores.
De acuerdo con el denunciante, su empresa produce 12.000.000 de litros del biocombustible al año, pero inexplicablemente Petropar, bajo la administración de Rómulo Campos Krauer en el 2014, decidió dejar de comprarle el insumo ya que se cuestionó la falta de un aditivo específico. Luego, en abril de 2015 se reactivó la adquisición, pero fue nuevamente cortada el mes siguiente. Los demás emblemas siguieron comprándole, pero la estatal ya no lo hizo, lo que generó un daño financiero a Bioenergía, puesto que había invertido en una nueva maquinaria y se tenía producción en stock.
El cuestionamiento por el aditivo se resolvía rápidamente e incluso un informe del Instituto Nacional de Tecnología y Normalización (INTN) mostraba que la compañía cumplía con las exigencias, mencionó Bütner. Añadió que desde el 2013 hasta mayo del 2015, su firma facturó a Petropar G. 21.383 millones por 6.800.000 litros vendidos, lo que evidencia que el energético no tenía inconvenientes. Cree que hay un trasfondo político, puesto que él está identificado con el Partido Liberal. El hecho de que la petrolera estatal diga que el biodiésel tenía problemas derivó en que las compañías privadas también dejen de surtirse de Bionergía, lamentó.
El empresario anunció que planteará una demanda internacional contra el MIC y Petropar por resarcimiento de daños y perjuicios, dado el incumplimiento de la Ley, y por el daño moral generado contra directivos de la empresa, ya que la industria de los biocombustibles genera empleo para muchos paraguayos.
“La Ley 2748/05 habla de una mezcla obligatoria del biodiésel. Orgullosamente, Paraguay fue uno de los países pioneros en implementar el fomento al biodiésel, considerando las grandes ventajas que brinda. Mi empresa es una de las más antiguas del ramo y que Petropar nos haya dejado de comprar nos llevó a una zozobra muy grande e incluso hicimos una convocatoria de acreedores. En el 2015 se frenó nuestra inversión, una maquinaria nueva está parada por negligencia del Gobierno. El tema del aditivo es fácil de solucionar, se nota que (el Gobierno) no tiene voluntad”, manifestó.
SIN ABASTECIMIENTO. Eddie Jara Rojas, presidente de Petropar, comentó que hasta el momento no recibió ninguna nota de parte de Bioenergía al respecto y que la decisión de no comprarle biodiésel correspondió a la administración de Campos Krauer.
Explicó que en la última convocatoria nacional de proveedores de biodiésel vegetal se presentaron las compañías Indupalma y Multiagro. Las firmas estaban proveyendo normalmente, pero luego quebraron stock por alguna razón. Esto hizo que el pasado 11 de enero, el MIC, a través de la Dirección General de Combustibles, tome la decisión de suspender la obligatoriedad de la mezcla del 1% del biodiésel de tipo 3 hasta que se vuelva a tener en existencia el biodiésel.