La intervención con carácter de urgencia de la ANDE para desconectar todas las instalaciones eléctricas clandestinas y la sobrecarga existente, tanto en las casillas ubicadas en las calles como en los mismos comercios, fue solicitada ayer por el concejal Humberto Blasco.
En su minuta, derivada a la Intendencia para su consideración, el edil señala que se hace necesaria la presencia de los técnicos de la entidad energética para regularizar la utilización de la red de electricidad en toda la zona mercantil, de manera de evitar que se siga teniendo una alta probabilidad de incendios en todo ese sitio.
Blasco mencionó que en el siniestro ocurrido el pasado domingo 30 en horas de la madrugada, que consumió dos casillas de la vía pública y tres salones con millonarias pérdidas en mercaderías, la posible causa del inicio del fuego refiere que serían las malas condiciones del cablerío y las conexiones clandestinas.
Resalta que esta intervención se basa en las atribuciones establecidas en la Carta Orgánica de la ANDE y en el Código Penal.
Solicitó, igualmente, que el Ejecutivo Municipal remita un informe de lo actuado en un plazo no mayor a 15 días.
POSTURA. A través de un comunicado dado a conocer a la opinión pública, las autoridades de la ANDE señalan que las conexiones clandestinas en el extenso territorio del Mercado 4 son “casi inevitables”, lamentando al mismo tiempo que haya instalaciones legales pero precarias, que son igualmente peligrosas.
Confirma en este documento que este tipo de utilización irregular del servicio es una constante en ese centro de abastecimiento capitalino y que tal situación constituye una responsabilidad personal de cada propietario de las casillas y de los negocios del lugar.
Informan que se llevaron adelante varias charlas de concienciación con los permisionarios y con las autoridades de este mercado asunceno, pero que pasado el tiempo el panorama se mantiene igual o con mayor posibilidad de riesgo para vendedores y clientes.
Finalmente, señala que uno de los objetivos de la Administración es cambiar los nichos de madera donde están instalados los medidores por los de material de policarbonato, que es antiinflamable y más resistente a los cambios climáticos, principalmente, el calor, que es el que se tendrá en esta temporada.