Se inhibió el camarista Juan Carlos Paredes, por amistad con varios de los accionantes, además de que su hijo trabajaba en el Congreso.
Le siguió Carlos Escobar, quien alegó que emitió opinión como docente sobre el caso. También la camarista María Sol Zuccolillo, pariente del ministro César Garay.
Todos ellos son del Tribunal de Apelación en lo Civil y Comercial, Segunda Sala, por lo que pasó luego a la Tercera Sala.
Así, pasó a la camarista María Mercedes Boungermini, quien rechazó también entender en la causa.
Al final, quedó con el camarista Neri Villalba, quien por lo avanzado de la hora ya quedó para el próximo lunes decidir si acepta o no integrar el pleno de la Sala Constitucional.
Hasta el momento, la acción está parada debido a que no se pudo aún integrar la Corte en reemplazo de la ministra Gladys Bareiro.
La integración se definirá recién la próxima semana, con lo que se verá si los ministros admiten o rechazan la acción y la medida cautelar.