“No podemos realizar ningún tipo de cobro ni tampoco retirar recibos que están dentro del Rectorado”, refirió José Cañiza, de Fesiuna.
El gremio emitió ayer un comunicado para urgir la convocatoria de los asambleístas de la UNA para reactivar la actividad administrativa en la institución.
Los trámites están totalmente paralizados y afectan en específico a beneficiarios del programa Becal y a investigadores que se solventan con recursos de fuente 30.
Los becarios, por ejemplo, no pueden recibir sus fondos porque las gestiones para el efecto deben realizarse en el Rectorado. “Lo único que va a destrabar esta situación es que la Asamblea se reúna y apruebe el pedido de los estudiantes, de lo contrario, será en vano que se repita lo mismo que la vez pasada”, apuntó.
En caso de que la AU llame a otra sesión extraordinaria, los universitarios habilitarán por unos días la entrada al edificio. Los integrantes del movimiento #UNAnotecalles responsabilizan a las autoridades de esta situación.