Esto, porque los camaristas José Waldir Servín, Agustín Lovera Cañete y Gustavo Santander revocaron la resolución de la jueza de Ejecución, Mercedes Aguirre, que había establecido como pena unificada la de 24 años de penitenciaría.
El caso es que Aldo Meza, integrante del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), fue condenado a 15 años de cárcel por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi.
Además, también le habían condenado a 15 años de cárcel por el secuestro y homicidio de Cecilia Cubas, la hija del ex presidente de la República Raúl Cubas, y de la actual senadora Mirta Gusinky.
Ante las dos condenas, la jueza de Ejecución, Mercedes Aguirre, había determinado una pena unitaria en las dos causas, aunque en nuestra legislación no hay sumatoria de penas, sino una unificación.
Con ello, dispuso que la misma sea de 24 años de cárcel, que debían ser cumplidos el 2 de julio del 2028. Así, tenía derecho a pedir libertad condicional el 2 de julio del 2020, y el 2 de julio del 2016, ya había cumplido la mitad de la pena unificada.
La abogada Gessy Ruiz Díaz, que representa a Mirta Gusinky, por la querella en el caso del secuestro y muerte de Cecilia Cubas, apeló la resolución de la jueza Aguirre. La misma señalaba que en ambos casos, se le dio la pena máxima a Meza, por lo que se debía determinar que la pena unificada sea de 30 años.
La defensora Pública, Rosana Caballero, señaló que no se podían sumar las penas, y que debía confirmarse el fallo de la magistrada. La fiscala Rosa Heinroth también pidió unificar las penas a 30 años.
Ya en el análisis de los camaristas, el camarista Lovera Cañete votó por ratificar el fallo. Mientras, Servín y Santander votaron por elevar la pena a 28 años de encierro.
El voto en mayoría hace un análisis de los fines de la pena, del principio de reprochabilidad, resocialización y la prevención, con lo que entienden que la pena justa y útil era de 28 años.
Hace poco le dieron otros 19 años
Hace unas semanas, Aldo Damián Meza había sido encontrado culpable de homicidio doloso en grado de tentativa, por lo que fue condenado a 19 años de cárcel, la que ahora se encuentra apelada.
En el mismo juicio oral, que se desarrolló en plena pandemia en la Agrupación Especializada, también habían condenado a 23 años de cárcel a Alcides Oviedo Brítez, mientras que su ex esposa Carmen Villalba recibió 17 años de encierro.
Fueron acusados de intentar matar al comisario Merardo Palacios y a los oficiales de la Policía Francisco López y Alberto Barboza, en medio de un intento de fuga que protagonizaron el 2 de julio del 2004, en Ñemby, Departamento Central.