El hecho ocurrió el sábado, pero recién ayer salió a la luz luego de que una de las afectadas hizo público el caso, a través de las redes sociales.
La joven explicó que decidieron ir a realizar turismo de aventura y estaban disfrutando de la maravillosa vista que ofrece ese lugar, cuando irrumpieron hombres encapuchados que portaban armas de grueso calibre.
Los desconocidos eran seis, según recuerda una de las víctimas y en todo momento actuaron con violencia. “A mi amigo le tiraron al suelo con las manos sobre la cabeza y entre dos le estaban apuntando con sus armas”, reveló Monserrat, quien sostiene que aún no puede recuperarse de la situación traumática que les tocó pasar.
Además de armas de fuego, los encapuchados también llevaban cuchillos y uno de ellos amenazó con agredir a una de las víctimas, por lo que el grupo vivió varios minutos de terror.
Indicó que luego de dejar en claro sus intenciones, los asaltantes pidieron que entreguen sus pertenencias.
Se llevaron teléfonos celulares, dinero y otras pertenencias. “Nosotros no nos negamos a darles nada”, reveló.
Eran alrededor de las 09:30 del sábado, a plena luz del día, reveló la afectada.
Luego de realizar su cometido, los asaltantes bajaron a toda prisa el cerro, que es el punto más alto del Paraguay y está ubicado en jurisdicción del Municipio de General Eugenio Garay, Departamento de Guairá.
AVISO A LA POLICÍA. Fueron los agentes de la comisaría de esa localidad quienes llegaron al lugar, ya que una de las víctimas logró conservar su teléfono y llamó a los uniformados.
Cuando llegaron los intervinientes, los afectados relataron lo sucedido y se labró un acta. Luego acompañaron a los cuatro jóvenes a los vehículos que los llevaron hasta la vera del cerro.
Monserrat, a pesar de la desagradable situación que les tocó vivir a ella y sus amigos, celebró que ninguno de ellos haya resultado herido y que los objetos materiales pueden ser recuperados.
La joven explicó que decidió hacer público lo sucedido para alertar a otros visitantes, ya que esa zona es muy concurrida, llegando turistas de distintos puntos del país.
Lamentó que en el momento en que fueron asaltados no haya guardias en el sitio y que la inseguridad también cause zozobra a los turistas. “Hago pública esta experiencia para que si van, tomen las debidas precauciones. Dejen todo lo que sea de valor y suban solo lo necesario. La seguridad del lugar deja mucho que desear”, concluyó.