–¿Qué opinión le merece el escándalo dentro de la Policía Nacional?
–Sin duda, cuando empezaba todo esto, estábamos en contacto en forma permanente con el ministro del Interior (Francisco De Vargas) y le pedí que sea muy prudente. Respetar las investigaciones, ir accediendo a la documentación que iba encontrando la Fiscalía de este caso que aparentemente es de larga data. No quiero ser absolutamente irresponsable con nombres ni nada, pero cuando tuvimos la evidencia realmente se hizo lo que se tuvo que hacer. No dudamos. Hay gente que aparentemente estuvo en esto desde antes, volvió y toda esa situación es la que hace a este caso.
–¿Cuándo se decidió la destitución del comandante y otras autoridades?
–En este momento nos toca demostrar que fuimos y somos coherentes. Encontramos una historia que realmente viene causando tanto daño, hay que actuar. Nosotros evaluamos que con las tarjetas de Petropar, el control cruzado y la trazabilidad que esto va dando, estimamos que vamos a tener ahorros muy importantes y también en el Palacio (de Gobierno) pasó eso.
–¿Qué ocurrió en el Palacio?
–Nosotros, de un gasto muy importante que teníamos, creo de G. 66 millones a la semana, pudimos hoy reducir a G. 16 millones, porque cuidamos el dinero que es del pueblo porque tenemos la obligación. A eso nos comprometimos y en eso estamos. Lo que dijimos es que la gente tiene que saber lo que va pasando y hacemos nuestra parte. La Justicia tiene que hacer la otra parte.
–¿Le sorprendió lo del comisario Alvarenga, que era su hombre de confianza?
–No. Al comandante lo puso el ministro del Interior. En todo lo que nos íbamos proponiendo, claramente siempre le pedí mil veces trabajar en la institucionalidad. Una experiencia muy buena, por ejemplo, es que ya los que vienen entrando a la Policía sea por concurso. Se están llevando unas estadísticas que dicen que aquellos que ingresaron por concurso tienen calificaciones muy buenas. Es un proceso de muchos años. Antes entraban (a la Policía) de manera muy fácil 1.500 policías por año, sin concurso, no necesariamente los mejores. También se les dio armas y uniformes. Cuando apareció esto (el caso combustible) le pusimos toda la determinación que hay que poner.
–¿Qué cree que le falta a la Policía para que sea una institución transparente? Muchas veces, incorrectamente, se excusan en el bajo salario y poca estructura para delinquir.
–Todo. Nosotros miramos mucho Colombia. De hecho, hace dos semanas vino el general de Inteligencia de la Policía de Colombia (Jorge Luis Vargas) a revisar un poco lo que estábamos haciendo en Concepción con la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y nos ve muy bien encaminados.
–¿Qué méritos usted ve en De Vargas (ministro del Interior) para que siga en el cargo?
–Permanentemente escucho que me piden por la cabeza de De Vargas.
–¿Y cuáles son sus méritos para que siga?
–Estadísticas. Yo con lo que no voy a pelear es con las estadísticas. Cuánto había de motochorros, cuántos tenemos de motochorros, cuánto tenemos de homicidios. Si sacamos dos departamentos: Amambay y Canindeyú, el índice de homicidios en Paraguay tiene niveles de países nórdicos, sacando esos dos departamentos.
–¿Y qué se puede hacer, presidente, con esos dos departamentos que usted menciona?
–Ustedes no podrán negar que en todos los casos estamos haciendo lo que está al alcance y un poco más. Hay que reconocer que ayer, cuando ocurrían algunos crímenes que sacudían al país, a todos, nunca se esclarecían. Hoy la Policía paraguaya, que siguió el trabajo, fue y aprehendió a un asesino en el Brasil (Vilmar Neneco Acosta, acusado de la muerte del periodista Pablo Medina). El caso lamentable también de Magdaleno Silva (político colorado asesinado en Yvy Yaú hace dos semanas) policialmente está totalmente esclarecido. Hoy se esclarecen los crímenes. Aquellos que piden su cabeza (del ministro), yo solicito que más que pedir en forma irresponsable vengan con sus estadísticas y las comparamos. El ministro del Interior ha ido a cuantos lugares le han llamado, Cámara de Anunciantes, al Partido Colorado, a rendir cuentas. Hay que ver qué dicen las estadísticas y la seriedad que tiene su trabajo. Por eso tiene todo mi respaldo el ministro, porque institucionalmente estamos dando los pasos que todos los paraguayos queremos, que la Policía sea cada vez más fuerte.
–¿Este es el primer caso de corrupción bajo su gobierno, lo que ocurrió en la Policía? ¿Lo inquieta?
–Hablemos muy claro. El Gobierno, los ministros, no. Yo no te digo que en Aduanas no pasa nada. Que en Puertos no pasa nada, que en la Policía no pasa nada, que en los entes autárquicos no pasa nada. La Policía es una institución que está en el Gobierno. Lo que este Gobierno está demostrando es que cuando ocurre algo, reacciona, y vamos a ver cuántos gobiernos pasaron y si esto ocurría (destitución de toda la cúpula policial tras una investigación). En este gobierno se toma la determinación que en otros gobiernos no se tomó. Le llamo Gobierno al Ejecutivo y a sus ministros, y en ese ámbito, gracias a Dios, no hemos tenido ninguna denuncia de corrupción, pero señalar que en Aduanas pasó un contrabando y que el Gobierno sea corrupto por eso, no. Que en la Policía haya ocurrido un acto de corrupción y que por eso el Gobierno sea corrupto, no. Felicito que hoy se tomó la determinación que se tomó. Hoy los controles vinieron a través de Petropar, de donde inmediatamente se avisó al ministro del Interior y se obró en consecuencia. Acá lo que estamos debatiendo es que estamos apostando a la transparencia, que a través de los controles se están descubriendo cosas que son muy antiguas. Demostramos que si descubrimos algo, tomamos decisiones.