La Selección Paraguaya rescató un empate (1-1) en su visita a Bratislava ante Eslovaquia, en el segundo juego del combo de fecha FIFA. El gol lo marcó Alejandro Romero Gamarra.
El elenco nacional expuso un buen volumen de juego en la primera parte del compromiso. Con la alta presión, bajo una marcada línea de 4-3-3, el equipo paraguayo ahogó al rival, generando las mejores acciones en ofensiva, aunque careciendo de precisión en la definición.
El constante relevo de los hombres de contención en apoyo a la línea de ataque, tuvo un respaldo efectivo con proyección de los laterales. Las fluidas acciones en ofensiva generaron pequeñas sociedades en el circuito de juego albirrojo, que en esa fracción del juego tuvieron efectividad en los pases cortos y seguros.
BAJÓN FÍSICO. En la complementaria, el desgaste hizo efecto, por lo que el equipo guaraní perdió intensidad, volviéndose un equipo largo sin retroceso.
Eslovaquia aprovechó el bajón para golpear a una defensa que sigue teniendo descoordinación para la marca, dejando en evidencia falencias puntuales (como la tibia marca de Junior Alonso para el gol eslovaco, marcando en zona derecha como relevo de Gustavo Gómez).
Berizzo movió la banca y apostó por la velocidad de los volantes. Las variantes dieron otro dinamismo al frente de ataque, recuperando el protagonismo en los minutos finales. Para destacar, la generación de juego ante un equipo que apostó a defender, mientras que sigue preocupando la carencia de efectividad en definición.
“Debemos ser más efectivos”
El entrenador Eduardo Berizzo expuso tras el empate con Eslovaquia: “Sensaciones positivas nos dejó el primer tiempo donde no pudimos concretar y el equipo tuvo reacción”.
Además, agregó: “A corregir es ser más efectivos e impedir que una situación ponga el partido en dificultades”.
Paraguay volverá a jugar en noviembre ante Venezuela y Argentina.
Jorge Morel
Lideró y controló en el medio, siendo intenso para la presión y recuperación. En el desdoble tuvo presencia en ataque.