Producción: An Morínigo.
SÍNTOMAS CLÁSICOS
Cuando se presentan estos síntomas, se requieren cuidados hospitalarios: hidratación con suero y monitoreo permanente para evitar que se complique.
CUÁNDO CONSULTAR
Si hay signos de alarma o la persona está en alguno de los grupos vulnerables (de riesgo), deberá internarse para ser monitoreada y disminuir posibilidades de complicaciones.
LOS QUE TIENEN MÁS RIESGOS
menos 24 horas.
HIDRATACIÓN, UN ASPECTO CLAVE
“El principal tratamiento para el dengue consiste en mantener adecuadamente hidratado al paciente”, asegura el doctor Antonio Arbo. Si la persona no lo puede hacer por sus propios medios, debe recibir suero por vena.
“El equilibrio del cuerpo depende mucho de la cantidad de sangre que llega a todos sus componentes. Cuando la sangre escapa de los vasos, disminuye el volumen sanguíneo en el cuerpo y eso empieza a afectar los órganos. Por eso, la hidratación es fundamental”, insiste.
LA VACUNA
Actualmente, existe una vacuna contra el dengue con licencia (de Sanofi) y otra que está a punto de licenciarse (de Takeda). Según Antonio Arbo, la primera ha demostrado que es muy efectiva en aquellos que ya tuvieron la enfermedad, en los cuales la protección es del 90% contra cualquier forma severa. Sin embargo, en aquellos que no han tenido dengue, se podría incrementar el riesgo de sufrir una forma más grave, según sugieren algunos estudios.
Actualmente, la posición de la Sociedad Paraguaya de Pediatría, de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica y de la Asociación Latinoamericana de Pediatría, es que la vacuna se administre solo a aquellos que ya han padecido dengue y que sean mayores de nueve años. En cambio, en aquellos que no lo han sufrido, la postura es posponer la vacunación hasta tener más información.
DE ENFERMARSE
El virus del dengue tiene cuatro serotipos (cepas): Dengue 1, 2, 3 y 4. La infección por un serotipo determinado genera inmunidad, pero solo contra ese mismo serotipo, no contra los demás. Eso significa que una persona puede enfermarse de dengue hasta cuatro veces en su vida.
ANÁLISIS CONFIRMATORIOS
Los estudios que se realizan en el país para confirmar un caso de dengue varían según el momento de la enfermedad. En los primeros cinco días desde el inicio de los síntomas, para confirmar el cuadro clínico por lo general se pide la determinación del componente de virus en sangre, un análisis que se denomina NS1 o test rápido.
También se puede solicitar el PCR (Reacción de Polimerasa en Cadena), que detecta el genoma del virus en sangre, y es una prueba mucho más específica.
IDENTIKIT DEL AEDES
Cómo luce. No todos los mosquitos transmiten el virus del dengue, solo la especie Aedes aegypti. Este mosquito tiene un tamaño normal (5 mm). Es negro, con escamas o rayitas blancas.
Es ella. El que pica no es el macho, sino la hembra, que necesita succionar sangre humana, porque esta tiene unos componentes que necesita para que se desarrollen los huevos que va a depositar. Su picadura no es fuerte, pasa casi inadvertida.
Sin virus, no pasa nada. Que te haya picado un Aedes hembra no significa necesariamente que te vas a enfermar de dengue. Esto solo sucede si el mosquito picó antes a una persona infectada con el virus. Si el insecto no tiene en su tracto digestivo sangre “contaminada”, no transmitirá la enfermedad.
Vuelo bajo. Por lo general no vuela a más de 60 cm del suelo. Por eso pica preferentemente en la zona de los pies y tobillos, aunque puede hacerlo también en el resto del cuerpo. Necesita que la “víctima” esté quieta; no se acerca si la persona está en movimiento.
Diurno. Prefiere picar de día: sus momentos de mayor actividad son las primeras horas de la mañana y al atardecer. Pero también puede hacerlo durante la noche si en la casa hay alguna luz artificial encendida.
Este sí, este no. Los mosquitos son atraídos por olores, lo que se denomina aminas aromáticas, y la cantidad de estas que se expresa en el sudor depende mucho de la genética y la alimentación de cada uno. Esa es una de las explicaciones de por qué un mosquito pica a algunas personas y no a otras.
Escondites. Es un mosquito urbano, que habita en las casas. Cuando no está alimentándose (picando), se esconde y reposa en lugares con poca luz, como baños, dormitorios, detrás de roperos o cortinas y debajo de las mesas. Por eso se recomienda ventilar las habitaciones.
600 de una. En todo su periodo de vida (20 a 35 días), puede poner huevos 4 a 5 veces, y en cada puesta deposita entre 120 y 150 huevecillos. Es decir, un solo mosquito puede llegar a poner al menos 600 huevos en un mes.
Agua limpia. Las larvas de mosquitos se desarrollan fundamentalmente en recipientes artificiales que contienen agua estancada limpia o poco turbia, pero que tengan paredes, pues en ellas se depositan los huevos. No se crían en charcos, ríos o arroyos; sí en estanques, piletas, floreros, cubiertas, botellas y otros recipientes donde se acumule agua de lluvia.
¿Yuyales? Los yuyales en sí no son criaderos de mosquitos Aedes. El problema con este tipo de lugares es que generalmente se utilizan como vertedero y en ellos se arroja basura que contiene todo tipo de recipientes, los cuales pueden servir de criaderos al acumularse allí el agua de lluvia.
“Crecen” rápido. Las larvas depositadas por la hembra Aedes, en algún recipiente con agua, se convierten en mosquitos adultos en menos de una semana. Por eso se recomienda revisar la casa una vez por semana para eliminar posibles criaderos y cortar su ciclo de desarrollo.
Vida intensa. Una vez que pica a una persona enferma y adquiere el virus, el Aedes infectará durante todo el resto de su vida. Si está en una habitación donde hay varias personas, picará hasta llenar su tracto digestivo.
Tiempos. Desde que el mosquito pica a una persona enferma de dengue (esta tiene que estar con fiebre), hasta que pueda ser capaz de transmitir el virus a otra, normalmente pasan de ocho a 10 días. Luego, al ser picada la segunda víctima, esta demora unos ocho a 15 días para desarrollar los primeros síntomas de la enfermedad. Es decir, si hay alguien enfermo en un lugar y es picado por un Aedes, los síntomas pueden presentarse entre 15 a 25 días después en otra persona cercana.
“Cada uno tiene que hacer lo propio”
“En Paraguay vamos a seguir teniendo dengue porque están dadas todas las condiciones. Y no hay que olvidar que esta es una enfermedad cíclica”, afirma el infectólogo y pediatra Antonio Arbo.
Es por eso que, según el especialista, “la lucha contra el dengue debe ser parte de una educación continua que se inicie en los hogares y se extienda a las escuelas, colegios y universidades. Este tipo de enfermedades transmitidas por insectos se presentan en forma periódica y siempre nos van a estar acompañando, con más o menos casos”.
“Cada uno tiene que hacer lo propio en su casa. Deben comprometerse tanto los gobernantes como los gobernados. Si no, vamos a seguir teniendo epidemias”, opina el exministro de Salud.
¿SIRVE FUMIGAR?
La fumigación no acaba con el dengue, es una medida complementaria para matar mosquitos adultos infectados en alguna zona donde hay un brote. Sin embargo, durante las fumigaciones no mueren todos, ya que la mayoría están dentro de las casas. Además, si hay recipientes con larvas, en pocos días producirán nuevos ejemplares adultos. Es por eso que la eliminación periódica de posibles criaderos sigue siendo la acción más efectiva.