04 may. 2024

Terapia ecuestre estimula desarrollo de chicos que padecen discapacidad

Es una habilitación y rehabilitación integral para tratar las discapacidades físico-psíquicas, y utiliza varias técnicas para lograr la inserción del paciente en la sociedad y su integración al grupo familiar.

Asistencia. Con la ayuda de los profesionales, Camila realiza sus ejercicios terapéuticos.

Asistencia. Con la ayuda de los profesionales, Camila realiza sus ejercicios terapéuticos.

Por Claudia Ocampos

Desde el primer día en que Camila, una niña de 8 años con trastornos generalizados del desarrollo (TGD), comenzó a realizar ejercicios con su compañero León (un caballo), se adaptó de forma inmediata, reflejando un humor alegre, una actitud más despierta y lo disfruta como un juego que le divierte, cuenta su madre, Eliza Sánchez.

“El hecho de que mi hija interactúe con el animal ya es más de lo que esperaba. Estar en contacto con León le ayuda a dominarse a sí misma y al animal, es como un dar y recibir, lo cual no se adquiere con una bicicleta o con un juguete”, expresó Eliza.

Desde muy temprana edad, Camila fue diagnosticada con TGD, comenzando así su tratamiento a nivel clínico y psicológico. Hasta cierto punto, llegó a ayudarla, sin embargo, desde hace un par de meses Camila presentó agresividad en su conducta y motivó a Eliza a buscar un complemento alternativo para su niña.

“No conocía sobre la equinoterapia hasta que leí en internet sobre la Fundación Equinoterapia Fe, y desde ahí, Camila inició sus clases terapéuticas con la profesora Elena Murdoch, especialista en Hipoterapia, y los beneficios ya son visibles”, dijo.

“Un día antes de venir para hacer sus ejercicios, Camila se pone contentísima, recuerda con cariño a su amigo y compañero León, y lo más importante es que muchos de los problemas de conducta que tenía se disiparon”, agregó.

Terapia Ecuestre. La ilusión que la transporta a Elena Murdoch a convertirse en una profesional de la Hipoterapia es una combinación de su experiencia de vida y de dedicación a su familia. “Cuando nace mi hijo Renato, en el año ’97, mi vida cambia 180° porque, de ser especialista en marketing, me volqué al área de la salud”, explica Murdoch.

Renato nació con 31 semanas de gestación, luego fue entubado en UTI (terapia intensiva) por más de 70 días, sin embargo, la falta de oxígeno en el cerebro desencadenó una cuadriplejía espástica que compromete su sistema motor. Luego de ser retirado del sanatorio, Elena lo lleva a la Argentina para tratarlo con Equinoterapia. Desde los 7 años Renato monta solo a caballo y cada día lleva una calidad de vida mucho mejor.

Especializaciones. “Seguí la carrera de Sicomotricista, soy profesora de equitación y me especialicé en todo lo que sea terapias ecuestres, que comprende la Hipoterapia y la Equinoterapia. De ahí en más, durante 15 años, me capacito en distintos cursos”, señaló Elena. “Como profesionales tratamos cinco áreas del organismo: la parte sicomotriz, neuromotriz, sociomotriz, sensomotriz y funcional, todas se asocian con la motricidad, porque el animal, como elemento de la terapia, es un ser vivo que, aunque parezca quieto, o está respirando o está en movimiento”, refirió.

La Fundación, que se encuentra en Mariano Roque Alonso, cuenta con un aporte para ONG desde el año 2009 de G. 100 millones. Actualmente funciona con una técnica en kinesiología, el apoyo de los hijos de Elena, un cuidador de los equinos, que son 6, los cuales tienen un amansamiento, una doma y un adiestramiento especial.

Las terapias ecuestres están indicadas a personas con discapacidades, con problemas de lenguaje y cada sesión dura 45 minutos (Ver infografía).