En horas de la siesta de ayer, ambos se entregaron en el Departamento de Judiciales de la Policía Nacional, donde fueron fichados, para luego ser derivados a la cárcel de Tacumbú.
Una orden del director de Institutos Penales, Julio Ramón Balbuena, autorizó a que ambos cumplan con su condena en el Penal de Tacumbú, que está cerrado temporalmente para recibir internos.
Así, a las 15:21, custodiado por agentes de la Agrupación Especializada de la Policía, Ramón González Daher y su hijo Fernando, hicieron su vía crucis hasta la Penitenciaría Nacional.
Vestía un look deportivo, sin su habitual camisa rosada, estaba con un buzo amarillo y azul del Sportivo Luqueño, club del cual fue presidente, es el interno número 2.806, mientras que su hijo es el 2.807. Quedaron en admisión, donde estará los próximos días.
Desde Tacumbú anunciaron que el usurero no tendrá privilegios dentro del reclusorio. Tampoco su hijo. Una larga lista de víctimas festejaron que ya está entre rejas.
RECUSACIÓN. Pero, bien temprano, había dado su último pataleo para evitar la prisión. Ramón González Daher recusó a la jueza de Ejecución Sandra Silveira, por tener íntima amistad y familiaridad de trato con la magistrada.
Incluso, dijo que la misma realizaba actividades de manera regular de culto religioso con su esposa. Con ello, pare evitar suspicacias, solicitó la separación de la causa de la jueza Silveira.
La magistrada informó que no mantenía ninguna relación de amistad íntima con la familia de Ramón González Daher, o frecuencia de trato como lo establece la ley. Reconoció que conoce a la esposa, y que se encontraron en misas, pero de muchos años atrás del 1996 a 2005.
Aseguró que no afectaba su función jurisdiccional, y solicitó el rechazo del pedido.
Los camaristas Arnulfo Arias, Gustavo Santander y Andrea Vera señalaron que la recusación hace presumir que en realidad se utilice para postergar el trámite que corresponda, por lo que rechazaron la recusación.
Al final, ya tras ser confirmada, la jueza dictó la orden de captura tanto de Ramón Mario González Daher como de su hijo Fernando González Karjallo, en virtud a la sentencia firme.
Esto fue notificado al departamento de Informática de la Policía Nacional, así como al Departamento de Migraciones, en caso de que el mismo saliera del país.
Sin embargo, los dos condenados, tras darse a conocer la resolución, se presentaron ante el Departamento de Judiciales de la Policía Nacional y de allí pasaron al penal de Tacumbú, donde ya cumplen con su sanción penal.
Harán cómputo final de penas de los dos condenados
Una vez que la Dirección de Institutos Penales comunique que Ramón González Daher y su hijo están presos, la jueza de Ejecución, Sandra Silveira, deberá determinar la fecha exacta en que ambos compurgarán su pena.
Como ambos ya estuvieron 6 meses presos, en el caso de RGD, será hasta marzo del 2037, mientras que el hijo estará hasta marzo del 2027.
Igualmente, deberá fijar las fechas en que podrá tener salidas transitorias (mitad de la pena), o podrá pedir libertad condicional, al cumplir con las dos terceras partes de la sanción.
Además, también está la figura de la redención, por la cual se restan días de su pena por el trabajo que realiza dentro del penal de Tacumbú.