Balanza al rojo vivo. Al menos seis de cada 10 adultos en Paraguay presentan problemas de sobrepeso en el país, lo que representa al 57,6% de la población en esta franja etaria.
La falta de recursos es una de las causas por las que muchas familias tienen una mala alimentación. Ante esta situación, la licenciada en Nutrición y responsable de la Unidad de Prevención de la Obesidad del Ministerio de Salud Pública, Gabriela Fretes, recomienda un trabajo conjunto de varias instituciones del Estado.
“Se podría ver la posibilidad de crear las condiciones para que la gente pueda acceder a productos saludables a un menor costo. En las aulas también se puede insistir en la importancia de la nutrición correcta, ya que la mala alimentación también es un problema educativo”, mencionó.
Comida chatarra. Señaló que la publicidad indiscriminada de alimentos chatarras contribuye al sobrepeso en los niños, sobre todo en edad escolar. Este es un problema que debe ser encarado y además ofrecer alternativas en las cantinas.
La zona urbana presenta los mayores índices de obesidad. “Haciendo una distribución de género, las más afectadas por la obesidad son las mujeres y entre ellas, las de escasos recursos o de bajo nivel educativo”, detalla.
Ayer, en el salón auditorio del Ministerio de Salud Pública se realizó el lanzamiento de la Campaña Cortá con la Obesidad. El emprendimiento apunta a realizar diversas actividades para concienciar a la población sobre los riesgos del sobrepeso y la obesidad, además de difundir consejos y cuidados ante este problema que ya se ha convertido en una epidemia.
Entran todos. Los números de más en la balanza no solo afectan a los adultos.
Según los datos relevados por salud, tres de cada diez niños están con varios kilos de más. La situación se traslada a las embarazadas, donde el 50% de ellas están con sobrepeso.
La nutricionista menciona que la campaña proyecta acciones a diez años.
La finalidad apunta a detener el aumento de la obesidad en los adultos, mientras que en los niños menores de 5 años, escolares y embarazadas se espera reducirla en un 30%.
Los números para tener un panorama sobre esta situación son recabados cada cinco años. En el 2017 se tendrá un nuevo mapa al respecto.
Al tener las cifras el próximo año, se podrá tener al menos una pequeña evaluación sobre el programa de Prevención de la Obesidad, que entró en funcionamiento en el 2015.