Por Rocío Cáceres
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Kchiporros, una de las bandas más admiradas del país, está de fiesta, festejando una década de trabajo. “Celebramos 10 años que pasaron volando y que trajeron muchísimo aprendizaje”, comenta Roberto Chirola Ruiz Díaz, vocalista de la banda, integrada además por Julio Troche (guitarra), Fernando Peyrat (batería), Rodrigo Ojeda (guitarra y segunda voz), Gustavo Gómez (percusión), Édgar Aquino (bajo), Diego Mieres (teclados), Néstor Barreto (trompeta), Yoni López (saxo) y Rudy González (trombón).
Desde el 2006 los chicos, de “sangre latina y corazón guaraní”, fusionan ritmos latinos con cumbia, ska, murgas y algún que otro toque de rock. Y el festejo de los 10 años será con esos ritmos, “como siempre celebramos sobre los escenarios, con una serie de grandes conciertos que venimos planeando para el 2017", adelanta Chirola.
Además “próximamente saldrá el contenido audiovisual que produjimos en el cierre de los Ojos Rojos Tour, lo que dará paso a un nuevo single, adelanto del 6º disco que también va a salir con un videoclip”, cuenta. A lo largo de diez años, los chicos supieron mantenerse unidos, y a fuerza de dedicación y trabajo lograron abrirse paso y afianzarse. “No existen secretos ni fórmulas, hay que estar atento a los tiempos y ser muy autocríticos para seguir creciendo y sentir que cada etapa representa y refleja el momento actual de la banda”, destaca Ruiz Díaz y agrega: “supimos cuándo apretar la propuesta para fusionar la frescura de la primera etapa con la madurez de estos tiempos, entre esos dos mundos se mueve nuestro nuevo sonido”.
inicios y desafíos. De sus inicios recuerda que lo hacían todo sin pensar mucho en el futuro. “Eramos simplemente unos afortunados a quienes se les dio la oportunidad de pasarla bien y viajar con amigos. Hoy la seguimos pasando bien y cada vez viajando más. Sin embargo, algo cambió, tal vez sea la conciencia del presente o entender que las palabras llegan y pueden influir en emociones y en pensamientos de la gente”, asegura. Los chicos “honestamente no” pensaron llegar tan lejos con la música. “Estando donde estamos, sentimos que nos queda mucho más por recorrer. Se siente como que acabamos de nacer”, asegura.
Como todo grupo ya consolidado, Kchiporros tiene responsabilidad extra. “Sí sentimos responsabilidad y presión, pero de nosotros mismos. Nosotros nos motivamos a seguir creciendo, y hace un tiempo nos pusimos como misión la expansión de la banda a nivel latinoamericano y más allá. Y todos los días trabajamos para cumplir ese objetivo”, asegura el vocalista del grupo.
Entre sus desafíos está “seguir haciendo canciones que reflejen a nuestra gente. Seguir creciendo como artistas y como seres humanos”, según Chirola.
Y las satisfacciones son muchas. “Saber que después de una década no solo seguimos vigentes, sino que estamos conectados con la gente, vamos conociéndonos y conociendo mejor nuestro idioma”, concluye.