El famoso Instituto Superior Interregional en Ciencias de la Salud, que dejó en 2016 a miles de estudiantes a la deriva, intentó engañar ahora a las propias autoridades del MEC. El año pasado sufrió el cierre de al menos 8 carreras y de 14 filiales, tras una intervención por parte del Consejo Nacional de Educación Superior (Cones).
Una vez que se levantó la suspensión impuesta a los registros de sus diplomas de grado y tecnicatura, la institución presentó, de forma indiscriminada, gran cantidad de paquetes de títulos y certificados de estudios para que sean homologados por el Ministerio.
Christian Godoy, director de la Dirección de Normalización y Procesos Académicos del MEC, explicó que en una primera instancia rechazaron todos los pedidos de titulación de Interregional porque figuraban alumnos de filiales que habían sido recién clausuradas por el Cones. “La primera tanda rectificamos y les devolvimos porque esas filiales no estaban inhabilitadas”, indicó.
En una segunda ocasión, el instituto presentó su artillería de diplomas y certificados a través del sistema Nautilus, un software que inauguró el MEC el año pasado, mediante el cual cada casa de estudio ingresa –de forma remota– los datos de sus alumnos junto a toda la documentación pertinente para el trámite de registro.
El disparador de la duda –dijo– fue que un alumno de Enfermería de Ñemby hizo su pasantía en un centro médico de Concepción.
“En los títulos y certificados ya decía Ñemby. Eso nos llamó la atención y ahí intensificamos los controles. Hicimos el pedido al Cones del listado de alumnos para cruzar los datos”, apuntó al señalar que trabajaron en conjunto con la Dirección de Verificación, Control y Registro de Títulos de Pregrado, Grado y Posgrado del Viceministerio de Educación Superior.
En total, hallaron que 19 títulos correspondían a la filial Concepción, una de las clausuradas por el órgano rector.
Godoy indicó que esos títulos entrarán ahora a un proceso de anulación, puesto que descartaron que se trate de reinserción de los estudiantes afectados a una sede habilitada. Incluso, no descartan encontrar más casos como estos.
ÚH intentó contactar con Emilio Guevara, dueño de Interregional, pero su teléfono celular daba apagado.