Indignación por ley que pone en riesgo Médanos del Chaco

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Total rechazo generó entre ambientalistas y sociedad civil el proyecto que pretende explotar una parte del Parque Nacional Médanos del Chaco, área protegida, para buscar hidrocarburos, tanto que debieron pronunciarse para alertar sobre el riesgo que representa para la fauna y la flora, únicas en la zona, incluyendo el tiríka.

El proyecto modifica la ley que declara como área silvestre protegida bajo dominio público al Parque Nacional Médanos del Chaco para que pueda ser explotado, y es impulsado por el cartismo, principalmente por el diputado Edwin Reimer. Fue aprobado y remitido al Senado con apoyo de gran parte de liberales y oficialistas.

La Organización Paraguaya de Conservación y Desarrollo Sustentable (Opades) exige “el veto inmediato a cualquier proyecto de ley que ponga en riesgo a una importante, única y biodiversa área silvestre protegida, como lo es el Parque Nacional Médanos del Chaco”.

Explicaron que “los Médanos protegen una naturaleza única, con una biodiversidad fantástica que aún no ha sido estudiada a profundidad, y tal como reza en su plan de manejo, el riesgo de erosión ecológica es muy elevado y cualquier modificación o uso inadecuado puede acarrear una catástrofe”.

El agrónomo Luis Recalde insistió en que la cantidad de hidrocarburos hallada ni siquiera es comercialmente importante y que el trasfondo es la ocupación del terreno. “La excusa para obtener apoyo político es el cuento del combustible barato; en realidad, es un proceso de blanqueamiento de títulos de propiedad y otras formas de apropiación de esos terrenos. Al final no habrá parque ni hidrocarburos, pero varios conseguirán estancias muy baratas”, advirtió.

Reimer asegura que el proyecto es para el desarrollo del Chaco, donde no se avanzó casi anda en la prospección de hidrocarburos, comparando con Argentina y Bolivia, según indicó. “Por qué tenemos que depender cien por ciento de importar hidrocarburos”, expresó.

Para el legislador, Petropar y otras empresas que tienen la concesión de una parte de esa zona hicieron poco o nada, y que esta ley que impide la exploración en el parque solo da inseguridad jurídica. Nombró a la empresa Primo Cano Martínez SA, que explota gas.

Cuando la liberal Celeste Amarilla lamentó que se impulse un proyecto que causaría enorme daño ambiental, manifestando que no todo es dinero, Reimer respondió que su actuación se enmarca en la responsabilidad del cuidado del entorno. “¿Por qué todo tiene que ser energía limpia?”, reclamó el parlamentario.

El independiente Jorge Brítez recordó que existen otras experiencias en Paraguay de exploración de este tipo y que siempre sale ganando solo un grupo empresarial.

En 2019 la Corte ya rechazó la acción de inconstitucional de una empresa que quiso explotar el parque.

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