El intendente de la ciudad de Villarrica, doctor Magín Benítez, aseguró que técnicamente la institución municipal se encuentra en quiebra debido a las millonarias deudas arrastradas de periodos anteriores, además del faltante de dinero producto de donaciones que en total superan los G. 11.590.819.273.
El intendente Magín Benítez junto con su equipo de asesores económicos-financieros, dieron a conocer las millonarias deudas acumuladas que dejan prácticamente en quiebra a la institución según el propio jefe comunal.
Benítez señaló que dentro de los más de G. 11 mil millones figuran faltantes de G. 2.240 millones que no poseen documentos respaldatorios, además de una malversación de G. 4.300 millones de una donación de Taiwán y un préstamo, como también la presunta apropiación de aportes jubilatorios de funcionarios que no se pagó a la Caja de Jubilaciones.
Además, mencionaron millonarias deudas con la Compañía de Luz y Fuerza SA (Clyfsa) por el uso de energía eléctrica, también a la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap), varios préstamos, bonos, caja de jubilaciones, funcionarios en general, concejales, docentes del área de arte, entre otras deudas que van sumando conforme pasan los días, ya que su detección se torna difícil por la falta de documentos.
sin registro. En ese sentido, el intendente señaló que tampoco cuenta con papeles del Fondo de Previsibilidad, que en ningún registro de contabilidad fue incluido y no pueden tener información sobre muchos puntos como por ejemplo los juicios que la Comuna ha perdido.
El jefe comunal señaló que hubo una presunta malversación en la Comuna por utilizar dinero de donaciones de Taiwán, ya que de los casi G. 6.000 millones, cerca de G. 500 millones de utilizaron para pagar otras cosas, siendo que el dinero debía ser destinada exclusivamente para construir el teatro. “Ese dinero se utilizaba para pagar a las comisiones vecinales por ejemplo”, señaló Benítez.
Municipalidad se quedó sin documentos.
El intendente señaló que la falta de documentos en la Comuna se debe a que el ex intendente Alejandro Aguilera (ANR) llevó todo a la Contraloría General de la República, con el objetivo de pedir una auditoría de su propia administración. En ese momento, señaló que no ocultaba nada y que inclusive tenía todo en orden.
Benítez refirió que los documentos que llevó Aguilera a la Contraloría no solamente fueron de su gestión, sino también documentos pertenecientes a la administración de Gustavo Navarro, inclusive desde el periodo 2018.
Desde la Comuna informaron que carecen de biblioratos con orden de pago de gastos genuinos, royaltíes y Fonacide del 2018 al 2021. El municipio tampoco cuenta con contratos con empresas y de recursos humanos.
“Acá se vivió un verdadero carnaval dentro de la institución y no apañararemos el daño patrimonial que causaron bajo ningún sentido. Estamos preparando denuncias con mis asesores jurídicos denuncias para presentarlas ante los organismos pertinentes”, finalizó el intendente.