Penayo dijo que con la protección que recibió el intendente de Lambaré, Armando Gómez, como parte de la negociación del cartismo y llanismo para hacer los cambios en la Cámara, los deja expuestos como colorados ante la ciudadanía. “Lo grave de esta situación es que son correligionarios que tenían el mandato de intervenir el Municipio, no como mandato imperativo, sino como un compromiso moral con el partido, un partido en función de gobierno que siempre habló de transparencia y ahora blinda a una administración de un intendente del que se duda de su honestidad y la decencia pública”, mencionó.
Agregó que “no estamos acompañando con nuestros actos la transparencia que buscamos en un gobierno central y eso me parece vergonzoso”. Recalcó que ninguno de los integrantes de la comisión especial, que votaron a favor de la intervención en su dictamen, se animó a defender el texto y citó a los diputados Ramón Romero Roa y Bernardo Villalba.
Causales. Cabe resaltar que Gómez fue imputado por el supuesto sobrecosto de un puente comunal y tiene denuncias por malversación de fondos.