Dicho consorcio obtendría un total de USD 170 millones por la gestión de recolección de basura al año en un lapso de 20 años.
El concejal Pablo Callizo, vocero del dictamen B, sostuvo que dicha concesión es irregular debido a que no se marca dentro de la ley de concesiones.
“Creo que estamos ante un escenario complicado porque ya existe una investigación abierta en la Contraloría y si realmente se demuestra de que el procedimiento es erróneo, estaríamos en la misma situación que se tuvo con la empresa Parxin en el cual se tendrá que anular el contrato”, refirió.
Asimismo, remarcó que ducha concesión no es llevada a cabo de la manera correcta en dicho procedimiento y que se debería realizar una contratación tanto del servicio de traslado, disposición final de los residuos, así como también la construcción de la planta de transferencia.
Agregó que esto se trata de un “regalito”, que se le está brindando a dicho consorcio en materia de construcciones.
Callizo mencionó que la Municipalidad negó a otras empresas para que puedan participar para la adjudicación mediante una licitación.
“Se le privó a muchas otras empresas para que puedan participar, creo que existen errores e inconvenientes en varios sentidos”, aseveró.
Por otra parte indicó que la zona del vertedero donde se dispondrá la basura cuenta con permiso hasta el 2024.
“Estamos dándole una concesión por 20 años sin asegurar realmente de que ese lugar le corresponda a las empresas que conforman el consorcio”, puntualizó.