Le hizo un buen partido a Guaraní, que estuvo ansioso y sin orden.
La virtud del Santo estuvo en la solidaridad que mostraron sus futbolistas, pues todos fueron en busca del balón cuando este estaba en poder del adversario.
El Legendario estuvo mal atrás y debe ser una llamada de atención para el técnico Fernando Jubero. Debe corregir los errores colectivos que tuvo anoche, porque en la Copa Libertadores el rival no le va a dar tregua.
Justamente de un error de Juan Patiño llegó el tanto del Rayadito. El zaguero aurinegro fue sorprendido por Ricardo Ortiz, quien tras la pifiada rival se llevó y definió con clase ante la salida de Antonio Franco, arquero del Aurinegro.
Apresuramiento. Guaraní fue el equipo que manejó las acciones en la etapa complementaria, pero a Julián Benítez, Federico Santander y a Marcelo Palau les faltó tranquilidad.
Sin restar méritos a las buenas tapadas que tuvo Víctor López, portero de San Lorenzo. Claro está.
La estrategia del Rayadito se sustenta en los contragolpes y anoche le dio muy buenos dividendos. Guaraní tuvo numerosas oportunidades para llegar a la paridad, pero ninguna de ellas las aprovechó, porque también la ansiedad les jugó un mala pasada a los integrantes del conjunto de Dos Bocas.
Este primer triunfo es un estímulo importante para San Lorenzo, que tiene la obligación de sumar la mayor cantidad de puntos para alcanzar su objetivo, que es seguir en el círculo privilegiado de nuestro fútbol.
Por lo que mostró anoche el Rayadito durante el desarrollo del juego, la formación dará pelea por los puntos con el rival que se le presente en el Clausura.