Esta situación es la que miles de conductores deben soportar desde hace casi un mes en las arterias que corren en paralelo a Presidente Franco, donde se vienen realizando trabajos de pavimentación, los cuales están actualmente a la altura de su cruce con 15 de Agosto.
En las vías utilizadas como alternativas, las autoridades municipales siguen permitiendo el estacionamiento a ambos lados de las aceras, lo que hace que se conviertan en estrechos pasillos que en la mayoría de los casos generan quebrantos para los colectivos de gran porte que no pueden girar por los rodados que quedan en las esquinas.
Ni siquiera sobre la emblemática Palma se respeta la prohibición de aparcamiento, donde las señales de tránsito se convierten en letra muerta, aportando de esa manera su cuota de caos para el febril flujo automovilístico que debe pasar por el lugar.
A esto se suma que los choferes de las unidades de transporte no tienen un itinerario establecido, por lo que adoptan caprichosamente sus propios circuitos, causando absoluta confusión en sus usuarios. Muchos doblan sobre Alberdi, van hasta Palma y suben Colón; en tanto que otros lo hacen por Nuestra Señora de la Asunción y deciden ir ya hasta General Díaz, por donde llegan hasta Colón.
RESPUESTA. El director de Tránsito de la Comuna capitalina, ingeniero Luis María Pereira, indicó que en la fecha ordenará una intervención en estas calles que se emplean como desvíos, de manera a observar qué tipo de medidas se pueden aplicar para que el tráfico sea más fluido.
El profesional dijo que coordinará con la Policía Municipal de Tránsito (PMT) para liberar parte de los espacios de estacionamiento en estos caminos alternativos a las obras viales, lo cual es un factor que hoy está embotellando la circulación por ese punto del microcentro asunceno.
“Vamos a intervenir y ver qué se puede hacer para que no haya tanto drama con el tráfico. Pero las calles son angostas y están bastante cargadas de vehículos”, expresó finalmente.