En un comunicado oficial, Puma Energy señaló que la baja se resolvió luego de un monitoreo de mercado y tiene como objetivo ofrecer calidad y mejor precio a sus clientes.
Apunta que la reducción del costo de los combustibles se realiza bajo el lema “Precio y calidad de venta”.
El gerente de Puma, Jorge Astigarraga, sostuvo que el objetivo es ofrecer al consumidor el mejor producto a precios competitivos.
En cuanto a las naftas, la Máxima de 95 octanos que se vendía a G. 5.970 pasa a costar G. 5.690; la Máxima Especial de 90 octanos que se vendía a G. 5.300 ahora se venderá a G. 4.990 el litro, mientras la Eco 85 Aditivada (común) de G. 4.050 pasa a G. 3.990.
El diesel Puma (Tipo III) se comercializará a G. 4.290 el litro, mientras que el Iom Puma Diesel (prémium) que costaba G. 5.690 pasará a costar G. 5.200.
Las 37 estaciones están ubicadas en capital y ciudades del área metropolitana.
GUERRA. Por otra parte, el directivo de Apesa, Ausberto Ortellado, dijo que prácticamente se está dando una guerra de precios propiciada por Petropar. Indicó que la estatal de combustibles empezó a instalar estaciones al lado de las tradicionales, que ahora se ven obligadas a bajar sus precios para poder competir.
Subrayó que las gasolineras están contra la pared debido a que son las distribuidoras las que establecen los precios. “Yo llamé a reclamar. Pedimos que baje ya en general para que esta guerra de precios que inició Petropar que nos afecta mucho le beneficie finalmente a la gente y no solo a ellos”, enfatizó.
Apuntó que muchas operadoras están siendo perjudicadas por Petropar. “De hecho está obligando a bajar los precios a las estaciones de servicio que no dependemos de nosotros, sino de nuestras distribuidoras. Quedamos en el medio como sandwich”, lamentó.
Finalmente, insistió en que las distribuidoras deberían bajar todo y cortar esta guerra de precios y gane la gente.