Sergio Noe
Fotografías inéditas, cartas personales y postales enviadas a sus familiares, testimonios de quienes lo conocieron personalmente y otros detalles de la vida íntima del máximo exponente de las letras paraguayas se compilaron en el flamante tomo Augusto Roa Bastos. El supremo escritor, recientemente lanzado.
El libro, que forma parte de la colección Creadores del Bicentenario y que cuenta con el apoyo de El Cabildo, surgió basado en una recopilación realizada por Mirta Roa, hija del autor de Hijo de hombre.
“Básicamente son las memorias de mi padre, desde cuando era chico hasta que él se hace famoso, con una vida pública que todos conocen. En tanto, este libro muestra los inicios, el cómo fue su vida en nuestra casa de la infancia, una faceta no conocida y que él mismo se encargó mucho de fabular, ya que no le gustaba mucho mostrar su vida privada”, cuenta Mirta Roa en exclusiva para ÚH.
Para separar la ficción de la realidad, la hija detalla que tuvo que corroborar ciertos relatos de su padre con los testimonios de su madre, con respecto a su primer exilio.
“Recopilamos muchas cartas que enviaba papá (Roa) a su padre y también a nosotros (sus hijos). Hay mucha información en las cartas, además de sus escritos cuando visitó Londres y escribía para el diario”, relata.
LONDRES. Mirta menciona, además, que la nueva publicación incorpora parte de su vida cuando de joven visitó Londres durante la posguerra, donde tuvo la oportunidad de entrevistar a figuras de la cultura, además de redactar notas durante su viaje en barco hasta el Viejo Continente.
“Hizo varios reportajes en Londres a personalidades importantes de la cultura y escribió muchos artículos para el periódico El País –que luego sería Última Hora– y que se recuperaron en la compilación La Inglaterra que yo vi, a cargo Milda Rivarola. Son sus crónicas cuando era joven periodista”, apunta la hija del escritor de Yo el Supremo.
Detalla que durante su viaje a Europa realizó conferencias sobre la literatura latinoamericana en varias ciudades.
“(Europa) Era un mundo totalmente diferente. Se fue como periodista y a manera de hacer estudios. Eso lo cuenta a mi mamá en sus cartas del 45”, dice Mirta.
EXILIO. En el libro, retoma los relatos de su madre sobre el primer exilio de Roa en 1947 a Buenos Aires, cuando un grupo violento de los Guiones Rojos destruyen el periódico El País de Asunción, donde el escritor se desempeñaba como editorialista.
“Este recuerdo está contado por mi mamá, ya que papá varía esta historia de diversos modos. Considero que la parte genuina es aquella que cuenta mi madre. Luego de su ida a Buenos Aires, nos fuimos nosotros. Así empezó su exilio a un país donde no era nadie. Aquí (en Paraguay) era conocido porque publicó cuentos y escribía en un periódico, pero allá no era nadie, no era conocido. Es así que como padre y esposo escribió cartas cuando aún vivíamos en Paraguay”, comenta Mirta.
El volumen también compila copias de manuscritos originales de Yo el Supremo. “Creo que presentar esto será de interés para los investigadores y entendidos en literatura”, señala la hija del autor de Contravida.
HUMANO. Mirta asegura que se trata de “memorias trasnochadas que mantengo de mi padre”, en su faceta “más humana y no tanto como escritor”, asegura. “No me meto con la obra de él... busco mostrar más su parte humana”, reconoce.
Roa expone que nunca en su vida vio un funeral como el de su padre, que duró tres días y donde presenció cuestiones increíbles. “A raíz de ese sepelio, los hijos decidimos hacer la fundación para preservar, compilar y proteger su obra, y es lo que hicimos”, concluye.