La defensa del ex senador Óscar González Daher pidió ayer al juez Rolando Duarte la nulidad de todos los audios filtrados del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), aduciendo ilegalidad.
Los abogados Sara Parquet, Bonifacio Ríos y Paola Gauto plantearon el incidente innominado de nulidad absoluta por obtención, grabación y agregación de audios ilegales.
Señalan que hubo edición y manipulación de los audios originales, y piden su exclusión como medio probatorio agregado por la Fiscalía.
La defensa sostiene que los audios difundidos en el programa A la Gran 730, por radio Cardinal, el 14 de diciembre del 2017, son ilegales ya que fueron obtenidos sin una orden judicial.
Además, argumenta que violan el derecho a la comunicación privada, por lo que es ilegal que sean admitidos como prueba en un proceso penal. Los abogados apuntan que la periodista Mabel Rehnfeldt reveló en su declaración ante la Fiscalía que eliminó el material en bruto, por temor de un allanamiento que buscaba, a toda costa, llegar a su fuente.
Como prueba, añade una publicación de ÚH del 23 de marzo pasado, y pide al juez se oficie al medio para que remita el ejemplar del diario de ese día.
PERICIA. Indica que con ello, además de ser ilegal que se pretenda usar para una pericia, “los mismos fueron cortados, manipulados, editados y contextualizados al antojo de la comunicadora”.
Habla de la doctrina del árbol envenenado, con lo que solicita la nulidad también de todas las actuaciones derivadas de la supuesta prueba ilegal. En su extenso escrito, la defensa cita también antecedentes de nulidad, específicamente de Argentina y EEUU.
Como precedente en el país, menciona la defensa del Dr. Manuel Domínguez, en 1898, al entonces ministro José Segundo Decoud, acusado de traición a la patria ante la Cámara de Diputados. Indica que en aquella ocasión, Domínguez argumentó que la acusación se basó en cartas íntimas de José Segundo a su hermano Adolfo, por lo que evidentemente las cartas fueron sustraídas, lo que les hacía ilegales. Con todo esto, pide la nulidad de los audios.