El juez Penal de Garantías Yoan Paul López resolvió este martes que la pediatra Laura Sena enfrente juicio oral y público en el , ocurrido en el Sanatorio Migone de Asunción el pasado 20 de agosto del 2019.
Rosi Angulo, abuela del niño, manifestó en conversación con NPY, que la elevación de la causa a juicio oral era el paso que esperaban porque tienen dos años y seis meses buscando justicia.
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“Los plazos se nos hacían muy largos, con las chicanas que iban presentando (la defensa) querían ganar tiempo para que este caso pueda quedar en el olvido”, expresó.
Aseguró que “con todo el amor que le tuvieron a Renato”, la familia empujó la causa para sostener, luchar y seguir pidiendo justicia “cada día de sus vidas”.
Explicó que la pediatra Laura Sena fue acusada por la por homicidio culposo, mientras que otros tres médicos, María de Fátima Bastos, José Manuel Ovando y Óscar Feliciano Cabrera Román están imputados por omisión de auxilio y tienen una audiencia ante el Juzgado, prevista para el 4 de abril próximo.
Mencionó que la Fiscalía pidió el sobreseimiento definitivo de los médicos y afirmó que la familia está “en total desacuerdo”.
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“La Fiscalía dice que se basa en la testifical de los peritos de la Junta Médica. De 12 de los peritos, por lo menos ocho son dependientes laboralmente del Sanatorio Migone y evidentemente no van a decir otra cosa”, lamentó.
Recordó que el momento del hecho quedó grabado en una cámara del circuito cerrado en la cual se escucha a la madre de Renato pedir auxilio y a tres “médicos eligiendo si comían pollo u otra cosa”.
Los antecedentes
Según los antecedentes del caso, Renato ingresó al sanatorio en cuestión a las 08:10, junto a su madre Macarena y Mirna López (niñera) para su atención médica, ya que presentaba cuadro febril y tos. Pero, tras algunas supuestas complicaciones, perdió la vida.
Los familiares habían denunciado supuestas irregularidades en la asistencia del paciente, quien ingresó al servicio de Urgencias y creen que un medicamento que le fue aplicado hizo que se descompensara y muriera. Además denunciaron falta de profesionalismo de médicos y de insumos básicos.
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La médica Laura Sena había asegurado que el niño no murió por omisión de auxilio, sino por una cardiopatía, sumada a una bronconeumonía.
De igual manera, indicó que una vez que el menor ingresó a la urgencia fue rápidamente atendido y cuando empezó a empeorar, ella fue a asistirlo.