Los bonos soberanos volvieron a sortear una nueva inestabilidad política. Luego de las crispaciones del 2017 por el intento de reelección del ex presidente Horacio Cartes, estas últimas semanas se convirtieron en una nueva prueba de fuego para los títulos del Tesoro en el mercado internacional, por la crisis desatada por el acta bilateral de Itaipú y la amenaza de juicio político que puso en jaque al presidente Mario Abdo Benítez.
De acuerdo con el informe del Ministerio de Hacienda, los precios y rendimientos de los títulos del Tesoro mantienen su calidad y siguen estables.
El reporte da cuenta que incluso los precios registraron repuntes. Por ejemplo, los bonos emitidos en el 2018 tenían un precio de 114,915 al cierre de julio, mientras que, al término de la semana pasada, el mismo subió a los 116,128. Esto quiere decir que el papel paraguayo está valorado en un 16,128% por encima de su valor inicial (100). Su rendimiento, es decir, la tasa de interés es de 4,601.
Los bonos emitidos en este año, cuyo vencimiento es en 2050, tuvieron un incremento similar. Al cierre del mes pasado, los títulos tenían un precio de 113,018, mientras que al término de la semana pasada aumentó a 114,420. Su rendimiento, por su parte, se ubicó en 4,543.
Bien valorados. El viceministro de Economía, Humberto Colmán, indicó que estos resultados traen tranquilidad al Gobierno, ya que esto significa que los tomadores de los bonos no están preocupados por la situación actual.
Señaló que en caso de que estas crispaciones hubieran impactado negativamente, los rendimientos irían aumentando y los precios bajando, ya que los inversores querrían deshacerse de los títulos paraguayos.
Por su parte, el director de Endeudamiento de Hacienda, Iván Haas, agregó que estos resultados confirman que ante los ojos de los mercados internacionales los bonos están bien vistos, lo que podría traducirse en menores intereses en futuras colocaciones.
Para el titular de la Bolsa de Valores y Productos de Asunción SA (Bvpasa), Rodrigo Callizo, esto es una buena señal para tener en cuenta en las nuevas emisiones, pero indicó que si la crisis se prolonga, podrían haber efectos negativos en el mediano plazo.