De hecho, cuando renunció al liderazgo de la bancada de Colorado Añetete, el parlamentario había tiroteado contra los mismos y es uno de los que presionan para los cambios en el Gabinete.
Sin embargo, para otros casos está cerrado a esa posibilidad, y quedó demostrado con el pedido de interpelación al ministro de Cultura, Rubén Capdevila.
Bacchetta fue uno de los principales articuladores para salvar al citado secretario de Estado, junto con los demás colorados del abdismo, el cartismo y sus eternos aliados, los liberales llanistas.
Recientemente había asegurado que el próximo 15 de agosto podría haber cambios de algunos ministros.
Había alegado que mucha gente es la que está pidiendo señales por parte del presidente de la República Mario Abdo Benitez, y que él solamente se hacía eco.
El titular del Indert en este momento está en la mira por una cuestión de concesión de tierras en forma irregular.
El senador del Frente Guasu Hugo Richer dijo que iban a estar atentos a las acciones de Vega, teniendo en cuenta una serie de denuncias.
En cuanto a Retamozo, desde el Senado Pedro Santa Cruz presentó una serie de denuncias en su contra debido a irregularidades en la concesión de puerto con Argentina, y además otras cuestiones que ya acercó a Fiscalía.
Hasta el momento al menos, pese a los cuestionamientos que se vienen dando, no existe ningún pedido concreto de interpelación para ninguno de los dos.
Durante la discusión que se había dado en la Cámara Alta con relación a la interpelación del ministro de Cultura, Bacchetta abiertamente sostuvo que estaba en contra.
“Los puntos que plantean los compañeros tienen sus respuestas. Es una persona que está trabajando bien”, dijo.
“Acompañaría la interpelación del titular del Indert, de Puertos, de otras entidades, pero esta persona que está trabajando bien, no acompañé y rechacé”, sentenció.
En defensa de Capdevila también sostuvo que está siempre pendiente del control y del procedimiento de todas las cuestiones que hacen a su cartera en Cultura.
Agregó que tenía toda la explicación en forma pormenorizada de los cuestionamientos que pesaban en su contra, pero no detalló.
Aseguró que el ministro estaba a disposición para acudir hasta el Senado, sin embargo rechazaron interpelarlo.
“Es injusta para un funcionario que está haciendo todo lo que está dentro de sus posibilidades”, indicó.
Los demás senadores colorados se sumaron a sus expresiones para salvar al secretario de Estado.
Los que tampoco permitieron que vaya a rendir cuentas, además de colorados y liberales, fueron los de Patria Querida. Este bloque decidió abstenerse a la hora de votar, mientras que en Hagamos lo hicieron en forma dividida.