El director ejecutivo de la Cámara Paraguaya de Comercializadores y Exportadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), Hugo Pastore, explicó que como consecuencia del bajo nivel del río Paraná, a la altura de la ciudad de Salto del Guairá, se optó por enviar gran parte de los productos, entre soja y maíz, vía terrestre. Sin embargo, los camiones no están avanzando en la zona de Aduanas de Mundo Nuevo, de Mato Grosso del Sur, donde los trámites tardan alrededor de dos semanas.
“Creo que mucho más allá del paso de la mercadería, es una cuestión humanitaria con las personas que están desde hace tiempo esperando una salida a este inconveniente”, indicó.
CONVOYES. En ese sentido, el gremio pide al Brasil que se puedan conformar convoyes de salida en grupos de 100 camiones para acelerar el proceso de exportación; además, sugiere aumentar la cantidad de funcionarios y extender el horario de atención en el puesto de Aduanas.
Los derivados de la soja también están pasando por la misma situación. La Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales refirió que hace un mes manifestó esta preocupación al canciller Federico González, pero que desde entonces lejos de observarse una mejoría, el tránsito empeoró.
“Para Cappro, el Gobierno debe seguir insistiendo en la normalización del tránsito fronterizo en forma urgente y convertirla en una cuestión de agenda vital para la economía paraguaya, debido al importante crecimiento del flujo de productos agrícolas y agroindustriales hacia el mercado brasileño, por lo cual instamos a encontrar soluciones permanentes que no pongan en riesgo los productos de exportación, y, por ende, a toda la economía del Paraguay”, expresa el comunicado de los industriales.