La iglesia se encuentra ubicada en las cercanías del Mercado Municipal Nº 4 de la capital.
Tanto transeúntes como conductores y hasta pasajeros del transporte público pudieron comulgar en la jornada atípica. Se tomaron todas las medidas de prevención a raíz de la pandemia del Covid-19.
“Virgen de los Dolores enseña el camino de la redención en un mundo herido”, se leía en un pasacalles instalado para la ocasión.
Todo tipo de rodados fueron igualmente bendecidos por los padres, que permanecieron durante la mañana sabatina por varias horas.
La respuesta de los fieles de la Iglesia Católica Apostólica Romana, tanto para la comunión como para las bendiciones, fue masiva.
Una fiesta. Durante las bendiciones y la comunión, participantes de la celebración animaban a la gente que pasaba por el lugar con tradicionales músicas religiosas, al son de una guitarra acústica cuyo sonido era ampliado con bafles instalados en una parte de la acera.