Sin embargo, en el nivel conducción política (incluye a parlamentarios, secretario/a general, secretario administrativo y asesores) la brecha entre géneros se profundiza todavía más porque solo el 24% son mujeres y el 76% son hombres.
En la Justicia. El documento también habla del Poder Judicial. Ahí existe un total de 21.478 funcionarios, la mayor parte, mujeres.
Estas suman 11.292 y representan el 53% del total, mientras que los hombres son 10.186, el 47% pero la conducción política es mayoritariamente masculina. El 56% (139) son hombres contra el 44% de mujeres (108).
Las funcionarias son mayoría a partir de la categoría B, de conducción superior donde representan el 52%, con 116 puestos, mientras los hombres son el 48%, con 106 cargos. Forman parte de este nivel los directores generales, directores, jefes de Gabinete, secretarios generales y auditores internos.
Ejecutivo. En este poder del Estado, las funcionarias representan la mayoría, el 53%.
Del total de 120.586 funcionarios, 56.901 son varones (el 47%) y 63.685 son mujeres. Sin embargo, estas representan la minoría en los niveles de conducción política (categoría A), donde alcanzan solo el 32% de los puestos (47) en comparación con el 68% ocupado por hombres (104).
Integran este nivel el presidente y vicepresidente de la República, ministros y cargos equivalentes, contralor general de la República, procurador general de la República, defensor del Pueblo, escribano mayor de Gobierno, gobernador departamental, subcontralor general, viceministros titulares de Subsecretarías de Estado y cargos equivalentes, defensor del Pueblo Adjunto, asesor, secretario departamental, presidente de entidades descentralizadas y superintendente.
La brecha entre géneros disminuye en el nivel B, de conducción superior, donde el 44% de los puestos están ocupados por mujeres (415) y el 56% a hombres (547).
El informe de la SFP concluye en que en Paraguay no existe ninguna norma que establezcan cuotas de género o multiculturalidad en cargos públicos.