La mediación del ministro del Trabajo, Guillermo Sosa, quien reunió a representantes de Aduanas, del Ministerio de Hacienda, de la Secretaría del Ambiente (Seam) y de Industria y Comercio con autoridades del Centro de Importadores de Vehículos Usado (Civu), no logró ayer desactivar la movilización en contra de la vigencia del Decreto Nº5822, que aumentó hasta el 25% el arancel aduanero para el sector.
Durante la reunión se escucharon a ambas partes bajar sus posiciones respecto a la citada norma impositiva. Los dirigentes del Civu, encabezados por su presidente, Miguel Barrios, pidieron que se suspenda la vigencia de la medida para buscar una nueva de consenso.
Rechazaron el criterio de Hacienda sobre la contaminación ambiental que generan los usados para establecer el aumento y también la contradicción de que se disponga que los vehículos flex y eléctricos, que no emiten gases, también paguen impuesto.
Exhibieron un estudio que utilizó la Cadam, gremio de empresas que importa vehículos cero kilómetro, sobre la contaminación y señalaron que es la calidad del combustible el principal problema.
En respuesta, tanto el ministro Sosa, como su viceministro del Trabajo, César Segovia, fue el de señalar la informalidad del sector y que apenas tienen 334 personas inscriptas en el IPS.
Asimismo, los representantes del Ministerio de Hacienda señalaron la existencia de evasión por parte de los importadores.
Al final de la reunión quedaron en convocar otra para mañana y en que el ministro Sosa dé una respuesta sobre el pedido para suspender la vigencia del decreto. Esta no llegó a la tarde y Barrios dijo que van a seguir en todo el país las movilizaciones.
DIFÍCIL. El titular del Civu dijo que él no podía garantizar ni frenar las acciones de todos los sectores afectados por esta medida. Puso de ejemplo a los cigüeñeros (los que transportan los vehículos desde el puerto chileno de Iquique) y los importadores del interior del país.
Apuntó que “se les está tocando el plato de comida y los cigüeñeros hace quince días que no tienen más trabajo por la falta de carga y tienen que pagar deudas”.
Insistió en que lo único que plantean es reformar la nueva disposición, estableciendo que sea mayor el arancel para vehículos con mayor cilindrada y no los que más se venden y son accesibles para la gente.
NEGATIVA. El ministro de Hacienda, Santiago Peña Palacios, dijo ayer que no se modificará el decreto que eleva los aranceles para la importación de autos usados.
Reiteró que la medida no es fiscalista, sino ambiental y que los vendedores que hoy comercializan autos usados de Chile pueden vender los autos ensamblados en Paraguay.
“Nosotros nos mantenemos. “Esta inquietud ya lo veníamos hablando con la Seam “de cómo privilegiamos el combustible menos contaminante y miramos las normativas del Mercosur”, recalcó el titular de Hacienda.