Cuando le entregaron el título de presidente, Marito dijo públicamente que él rechazaba las notas reversales Cartes-Macri. Poco después sus senadores y diputados aprobaron esas mismas notas reversales. ¿Falsedad de campaña o insubordinación?
A muchos nos interesa el pensamiento de Marito sobre Yacyretá y si tiene autoridad sobre sus seguidores.
Hago un resumen de la conversación sobre Yacyretá de casi dos horas por radio con el parlasuriano Ricardo Canesse.
Lo referente a Yacyretá lo podemos dividir en tres temas: soberanía, deudas y personas y obras afectadas.
Comencemos por lo más importante: la soberanía nacional y Yacyretá.
Ser soberanos consiste en el poder hacer lo que querramos con aquello que nos pertenece. Somos dueños en Yacyretá del 50% de la electricidad que se produde, aunque solamente usemos el 6% de ella. Argentina se queda con el 94%.
Seremos dueños realmente cuando tengamos posibilidad de tener en funcionamiento en Paraguay la línea de alta tensión Yacyretá-Villa Hayes. La línea está construida, pero falta la conexión con Yacyretá, que con diversas razones es retardada por Argentina.
Seremos también dueños cuando teniendo lo primero, podamos en libertad vender nuestra electricidad a precio de mercado al país que querramos. El convenio de las notas reversales Cartes-Macri lo prohíbe. Y Argentina nos paga una miseria por el 94% de la mitad de la electricidad producida en Yacyretá que es paraguaya. Hay indicios de que parte de esa electricidad paraguaya ella sí la vende a precio de mercado a Brasil y Uruguay. A sus dueños, el Paraguay, se nos prohíbe.
Esto está en las notas reversales Cartes-Macri.
Marito expresa públicamente en su campaña que no lo permite. Pero cuando en el Senado y en la Cámara de Diputados se presenta la ocasión de rechazar las notas reversales, entonces el grupo político de Marito las acepta en ambos sitios. ¿Marito mintió en la campaña o hay insubordinación en sus bases?