El jefe de la Comisaría 4.ª Central, Gaspar Mereles, relató en Monumental AM el caso registrado en la noche del martes.
Ana Martínez, de 94 años de edad, cansada de sufrir maltratos por parte de su hija planeó una estrategia para escapar de la vivienda. Pidió a su sobrina que la lleve a un local para reparar su teléfono celular, pero cuando llegó frente a la comisaría, pidió que se detenga y en ese momento pidió ayuda a un policía.
El uniformado la tuvo que bajar en brazos, atendiendo a que la mujer de avanzada edad no puede caminar. Cuando pudo conversar con el comisario, le manifestó que su hija la golpeaba, gritaba y varias veces no le cambiaba el pañal.
Le comentó que fue una mujer trabajadora que recorrió el mundo, que también leía libros y que no merecía ser tratada de esa manera.
Coincidentemente, el intendente de Lambaré, Armando Gómez, estaba de visita en la zona y también fue a la sede policial para saludar, hecho que fue aprovechado por Mereles, quien le comentó de la situación de la mujer y de la necesidad de encontrarle un lugar para pasar la noche.
El jefe comunal envió a sus funcionarios en compañía de agentes policiales a la vivienda de la anciana, pero allí encontraron borrachas a la hija y a la empleada. Finalmente, Martínez fue derivada a un albergue de Lambaré. El hecho fue comunicado a la Fiscalía.