No es el gallo de Los músicos de Bremen, del conocido relato de los Hermanos Grimm. Pero tal vez tiene la misma actitud intrépida y desafiante.
Era una tarde turbulenta en el centro de , donde como es usual los vehículos bocinaban para darse un lugar en el tráfico caótico sobre Mariscal López.
Fue el momento escogido por una gallina desconocida para intentar cruzar aquella salvaje fauna automovilística y continuar con su vida al otro lado de la calle.
La impaciencia de los vehículos, sin embargo, impidió que el animal pudiera lograr su objetivo de alcanzar la otra vereda.
La frustración, ante la mirada de un motociclista, motivó al animal a subirse al techo de un vehículo para impulsarse al punto de partida, a centímetros del Buen Pastor.
Según fuentes del entorno, la gallina pertenecía a una mujer que había realizado una caminata en las cercanías de la calle Choferes del Chaco, donde la curiosa gallina fue captada por la mirada de un fotógrafo del diario Última Hora.
Se desconoce el paradero del animal.