Cuatro posiciones estaban en la región de Metina, mientras que ocho estaban en Hakurk, ambas en el norte del país vecino, donde se encuentran algunas de las bases de la guerrilla kurda.
La aviación turco atacó estos objetivos después de obtener información de inteligencia recibida por aviones no tripulados.
“Nuestros aviones cumplieron sus obligaciones y volvieron a salvo a sus bases”, señala un comunicado de la cúpula del Ejército turco.
Turquía acaba de intensificar sus ofensivas contra los rebeldes del PKK tanto dentro como fuera de Turquía, causando decenas de bajas entre los guerrilleros.
El ejército aseguró ayer que en un operativo que duró tres días en la región de Cukurca, en la provincia de Hakkari, al sureste de Turquía, fueron “neutralizados” 157 rebeldes del PKK.
El PKK lanzó en 1984 su lucha armada contra el Estado turco a favor de más derechos para la minoría kurda.
Desde entonces han muerto más de 45.000 personas en atentados, ataques y enfrentamientos entre la guerrilla y las fuerzas de seguridad turcas.