“Prácticamente es un hecho que me alejo (de Honor Colorado), tengo posiciones y límites, y cuando me doy cuenta de que no tengo el trato o la consideración de mi compañero o amigo, hay que saber irse, y más cuando no estás de acuerdo”, expresó el segundo del Ejecutivo.
El vicepresidente Juan Afara dijo que comunicará de su decisión al líder del movimiento Honor Colorado, Horacio Cartes, apenas tenga la oportunidad. Quiere decirle de frente, porque le tiene un gran respeto al mandatario.
No está de acuerdo en la forma en que se lanzó la candidatura del ministro de Hacienda, Santiago Peña, como precandidato a la presidencia. El segundo del Ejecutivo esperaba ser llamado a una reunión previa, teniendo en cuenta el tiempo de trabajo conjunto.
“Estuvimos en un acto y a reglón seguido un grupo se aparta y se va a hacer el lanzamiento de la candidatura de un joven que se afilió hace seis meses al Partido Colorado. Para mí eso es una ofensa al partido y a la dirigencia y no estoy de acuerdo”, afirmó.
Lamentó que no fuera llamado en ningún momento por el jefe de Estado para hablar de ese tema y no entiende la respuesta a esa actitud, pero tampoco quiso ahondar sobre el punto argumentando que entró siendo correcto y quiere terminar de igual forma.
Sin embargo, admitió sentirse ninguneado desde hace tiempo en el movimiento oficialista debido a las decisiones tomadas. “Nunca fui con un problema, siempre conocí mi rol y traté de colaborar en todo. Trabajamos mucho para llegar”, indicó el vicepresidente en una entrevista con la 780 AM.
Agregó que durante su gestión jamás puso condicionamientos ante una decisión del presidente Horacio Cartes. Dijo que siempre respetó, porque esa es su conducta.
Juan Afara se mostró muy respetuoso de la dirigencia colorada, ya que la considera un agente social muy importante en las comunidades, sobre todo en el interior del país.
Su objetivo ahora es hablar con todos los líderes colorados para lograr un consenso de cara a las próximas elecciones generales del 2018.
QUIERE UN POLÍTICO. Afara mencionó que no le gusta la candidatura del ministro de Hacienda, porque considera que la administración de un país debe estar a cargo de un político con sensibilidad social.
“Creo que Peña es un técnico que hace bien su trabajo, pero prefiero a un político”, manifestó. Aunque reconoció que la falencia para lograr una política de Estado a lo largo del tiempo fue por falta de diálogo y madurez.
Está seguro de que el país necesita del liderazgo de una persona que tenga la sensibilidad para trabajar con la gente y desarrollar políticas públicas. Recordó que ese pensamiento lo tiene porque ya trabajó como intendente y gobernador de Itapúa.