Como cada 18 de julio desde 1994, cientos de personas desafiaron la niebla y el frío del invierno austral y se congregaron ante la sede de la Asociación de Mutuales Israelitas Argentinas (AMIA), en el barrio porteño de Once, con la consigna “En tiempos de impunidad, hacer memoria es exigir justicia”.
El sonido de una sirena a las 9.53, hora local, la hora exacta a la que en ese mismo lugar estalló una bomba hace 24 años, dio inicio a la ceremonia conmemorativa.
“En este instante, hace 24 años, asesinaron a nuestros padres y, desde ese momento, no podemos disfrutar del ejemplo de vida que nos daban día tras día. En este lugar, hace 24 años, nos arrancaron a nuestros esposos y hermanos y, desde ese momento, nos falta el compañero con quien compartir nuestras cosas”, señaló Luis Novaresio en el discurso de apertura.
Los allegados y representantes de la comunidad judía volvieron a reclamar que se haga justicia por el atentado, aún impune, y se atrape a los iraníes acusados por volar la sede de la mutua, todos ellos con pedidos de captura internacional. efe