16 feb. 2025

Volvió la calma a los aeropuertos de Brasil

Cinco días después del caos, la tranquilidad regresó a las principales terminales aéreas de Brasil. Se informó que 79 de los 635 vuelos de la mañana, es decir el 12,4%, registraron solo atrasos superiores a 1 hora.

EFE
São Paulo
La calma volvió ayer a los aeropuertos brasileños después de cinco días de caos por las cancelaciones y atrasos de numerosos vuelos, en su mayoría de la aerolínea TAM, que dejaron a miles de pasajeros en tierra en vísperas de la Navidad.
En los principales aeropuertos del país se registró poco movimiento en la mañana y, según la empresa estatal Infraero, el número de vuelos atrasados o cancelados disminuyó considerablemente.
La Agencia Nacional de Aviación Civil (Anac) informó, por su parte, de que 79 de los 635 vuelos programados para la mañana, es decir el 12,4%, registraron atrasos superiores a una hora.
Ese porcentaje es inferior al de los últimos días, cuando los atrasos afectaron en promedio a casi el 50% de los vuelos por problemas operacionales de TAM, empresa líder del mercado nacional, lo que generó tumultos en las terminales aéreas.
Entre el miércoles y el sábado la mayoría de los vuelos de TAM registraron atrasos de tres horas en promedio y, en algunos casos, la demora llegó a ser de doce horas.
Otros muchos vuelos fueron cancelados.
Según las autoridades, ayer se registraron atrasos menores en los dos aeropuertos de São Paulo y de Río de Janeiro, mientras que en el de Brasilia los pasajeros tuvieron que hacer largas filas para embarcar en los vuelos de TAM, pero prácticamente no hubo demoras en los despegues y aterrizajes.
El desorden en los aeropuertos brasileños comenzó en octubre pasado con unas protestas de los controladores de vuelo por mejores salarios y condiciones laborales, que pusieron al descubierto las deficiencias técnicas del transporte aéreo en el país.
Esas deficiencias están entre las causas del accidente de un Boeing 737-800 de Gol, que el pasado 29 de septiembre cayó en la selva amazónica, tras chocar en pleno vuelo con un avión menor. Los 154 ocupantes del Boeing murieron.
El caos del transporte aéreo se agravó en los días previos a la Navidad por los problemas de TAM, que abarrotaron los principales aeropuertos del país, en algunos de los cuales la Policía tuvo que intervenir para acabar las protestas de pasajeros indignados y las discusiones con empleados de la aerolínea.
Para reducir el caos aeroportuario el presidente Luiz Inácio Lula da Silva dispuso el viernes que ocho aviones de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) fuesen usados para el transporte de pasajeros de TAM.
La aerolínea también tuvo la ayuda de las rivales Varig y Gol, que durante el pasado fin de semana cedieron aviones y tripulantes para algunas de las rutas que TAM tuvo dificultades en atender.