Olimpia prosigue su gran forma futbolística de la Copa Libertadores ahora en el torneo local, tras vencer de visitante por 3-1 ante 12 de Octubre de Itauguá, en un reducto complejo para muchos equipos.
Si bien el “12” complicó por momentos a Olimpia, con un José Ariel Núñez movedizo y por instantes incontenible por la zona de volantes y defensores, pero que luego las marcas pudieron contener.
Pero el Decano siempre fue al frente, con un patrón que se está tornando una constante. Un tiempo en donde Tito Torres se lanza más en ataque por el sector izquierdo y el otro tiempo con Víctor Salazar más libre por el lado derecho. En este partido Tito tomó la lanza en el primer tiempo y el segundo fue del argentino.
El partido se quebró con un remate de fuera del área de Alejandro Silva, que colgó el balón al ángulo derecho de Cardozo para el 1-0, en lo que sería el presagio de un partido donde el volante se movió mucho, se hizo eje del juego y se lanzó de asistidor.
Pero el “12”, con sus armas, no se rindió, generó una jugada de penal (luego anulada por el VAR) y el penal que sí convalidó el VAR ante una falta de Aguilar a Núñez.
Pablo Velázquez definió esquinado, Aguilar no pudo contener y fue el empate 1-1.
Antes de finalizar el primer tiempo, una triangulación de Pitta con Silva terminó en centro para Derlis González, que el central Benítez no pudo despejar, por lo que bajo el arco fue gol para el 1-2 del Decano.
La complementaria fue de dominio y tenencia del balón de Olimpia, sin sufrir tanto los embates del rival, se cerró muy bien atrás, ocupó espacios y que liquidó con el bombazo de Pitta dentro del área para el 1-3 tras otra habilitación de Silva. Fue todo para los de Itauguá.
La confianza le llega a Olimpia en el momento justo, creciendo su juego, con dinamismo, pero aún debe ajustar marcas para no sufrir ante un Flamengo que será su máximo rival en la Libertadores.