Es que el Decano empezó mejor, con mucha proyección de jugadores, con Brian Montenegro y Walter González, que entró a luchar cada balón, de ahí llegó el penal que le hizo el portero Pérez a Brian y luego Alejandro Silva convirtió en gol.
Pero el Decano se fue diluyendo con el correr del partido, dando mayor posesión del balón al rival y así el Aurinegro se agrandó.
El factor determinante fue el ingreso en el segundo tiempo de Romeo Benítez, que desequilibró constantemente por el carril izquierdo.
Con un desborde de Romeo, que fue centro al medio del área, donde Saúl Salcedo se equivocó y sirvió el balón a Ángel Benítez, llegó el empate.
Nuevamente Salcedo se equivocó, perdió la marca de Fernando Fernández que de cabeza colgó el balón al ángulo para el 2-1. Olimpia se enreda en el torneo.
Olimpia agudiza su bajón y no levanta cabeza. Guaraní lo volteó 2-1.
Romeo Benítez
Fue un problema indescifrable para la defensa de Olimpia. Por el lateral izquierdo siempre generó peligro en ataque.