Hace casi cinco años, Ronaldo Luiz Nazario de Lima, apodado el “Fenómeno” por su gran capacidad goleadora, dejaba Italia para seguir su carrera en el fútbol español. El Real Madrid había pagado 45 millones de euros (35 millones más un jugador que se valoró en 10 millones, el argentino Santiago Solari) al Inter de Milán por el pase del jugador. Hoy el brasileño vuelve a ese país y a la misma ciudad, pero para vestir los colores del máximo rival del Inter, el Milan.
GRAN DIFERENCIA. Si bien Ronaldo llega al Milan con todos los focos y cámaras sobre su rostro, como figura que es, sale de Real obligado por las circunstancias, por el deseo de un técnico (Fabio Capello) que no lo quiere ver ni de cerca, pese a que su equipo sufre una carencia de gol. Además, llega por tan sólo 7,5 millones de euros, 37 menos que los que hace cincuenta y tres meses le costó al Real. Eso sí, también con varios kilogramos de más en su físico.
LA VIDA SIGUE. Ronaldo, que ya el pasado jueves se hizo ver en el estadio Giuseppe Meazza, durante el cotejo Milan-Roma (2-2), y que el viernes pasó revisión médica, firmó contrato hasta el 30 de junio de 2008. En sus primeras declaraciones a los medios dijo: “Acabo de firmar el contrato con el Milan. He sido traspasado por el Real Madrid y quería sólo agradecer a la afición, a la gente que me ha apoyado, a todos mis compañeros y a todos los entrenadores, menos uno, que he tenido” (refiriéndose a Capello). Luego expresó: “Ahora tengo otro desafío importante en mi vida, que es triunfar en Milán otra vez. Me da pena porque aquí me he sentido en casa en estos cuatro años y medio”. De verdad ha sido muy bonito todo. Es triste por el último día, pero a partir de mañana tengo otro desafío, la vida sigue”, concluyó Ronaldo.